Tener una noche de pesadillas es un fenómeno común que acompaña a muchas personas y que no supone un motivo de preocupación habitual. Sin embargo, para quienes experimentan desórdenes del sueño durante la etapa REM, las pesadillas podrían no solo manifestarse de manera más intensa sino actuar también como indicios tempranos de una posible patología neurodegenerativa, como el Parkinson.
Esto sugiere un estudio presentado por el Dr. John Peever de la Universidad de Toronto durante la Convención Canadiense de Neurociencias 2017.
“Observamos que más del 80% de las personas que sufren de un desorden de sueño REM eventualmente desarrollan Parkinson y demencia de cuerpos Lewy”
De acuerdo con los resultados del estudio realizado por Peever, gran porcentaje de las personas que experimentan trastornos del sueño en etapa REM desarrollan una enfermedad neurodegenerativa debido al funcionamiento anómalo de un conjunto de células llamadas neuronas REM-activas, que Peever asegura haber descubierto.
“Cuando activamos estas células, se produce una transición rápida hacia el sueño REM”, explica Peever. Durante esta fase, las personas “actúan físicamente sus sueños”, como ocurre cuando gritamos al tener una pesadilla intensa.
Durante el sueño REM normal, las vías nerviosas en el cerebro impiden que una persona se mueva, causando una parálisis temporal. Sin embargo, si alguien sufre de trastorno de conducta del sueño REM, estas vías no son activas causando que el individuo actúe físicamente su sueño. Algunos síntomas comunes incluyen mover los brazos, saltar, hablar, reír, gritar, exhibir expresiones emocionales y ser capaz de recordar el sueño si la persona despierta durante el episodio.
“Observamos que más del 80% de las personas que sufren de un desorden de sueño REM eventualmente desarrollan Parkinson y demencia de cuerpos Lewy. Nuestra investigación sugiere que los trastornos del sueño pueden ser una señal temprana de enfermedades que pudieran surgir 15 años más tarde”.
Peever espera que su investigación ayude al desarrollo de estrategias protectoras para preservar las estructuras neuronales y sus funciones.
Fuente: Medical Daily