En la actualidad, el sedentarismo es considerado una cuestión de salud pública. Investigadores han determinado que el estilo de vida sedentario resulta más nocivo que el tabaquismo. Pero el comportamiento sedentario en sí mismo podría no estar relacionado con problemas de salud mental y cognición, según una nueva investigación publicada en Mental Health and Physical Activity (Koolhaas et al., 2019).
La mayoría de los estudios examinan la relación entre los resultados adversos para la salud, incluida la mental y cognitiva, y el comportamiento sedentario medido por cuestionario. Pero las medidas objetivas y subjetivas no siempre se corresponden bien, advierte Chantal Koolhaas, autora del estudio y miembro del Centro Médico de la Universidad de Rotterdam.
“Tenemos datos únicos sobre el comportamiento sedentario, ya que el uso de dispositivos objetivos no era tan común en el año en que recopilamos nuestros datos. Por lo tanto, fuimos uno de los pocos con la posibilidad de examinar la asociación entre el comportamiento sedentario y los resultados de salud mental a lo largo del tiempo,” señaló.
Los investigadores analizaron los datos recopilados durante el Estudio de Rotterdam, un estudio poblacional en curso que se realizó en los Países Bajos desde 1990. El estudio ha reclutado a más de 15000 sujetos de 50 años o más.
Koolhaas y sus colegas estaban particularmente interesados en 1841 participantes que habían usado un dispositivo sensor de movimiento llamado actigraph durante siete días consecutivos.
Los altos niveles de tiempo sedentario se asociaron con síntomas depresivos, trastornos de ansiedad y peor rendimiento cognitivo, pero estas correlaciones desaparecieron después de que los investigadores controlaron la discapacidad, el tabaquismo y el estado laboral.
“Tener una discapacidad aumenta el riesgo de peor salud mental y cognitiva y se asocia con niveles más altos de tiempo sedentario. Por lo tanto, en este estudio, la discapacidad se consideró un factor de confusión; un antecedente de la exposición (tiempo sedentario) y el resultado (salud mental y cognitiva), y no en la vía causal,” dijeron los investigadores.
“Sin embargo, se podría argumentar que el comportamiento sedentario anterior había provocado discapacidades, lo que a su vez condujo a problemas de salud mental y problemas cognitivos.”
Pero en un análisis longitudinal, el comportamiento sedentario no estuvo relacionado con los síntomas depresivos, la ansiedad o el rendimiento cognitivo después de un período de seguimiento de 5,7 años, incluso cuando no se tuvieron en cuenta los factores de confusión.
“Según nuestro estudio, el comportamiento sedentario no está asociado con la salud mental y cognitiva adversa con el paso del tiempo. Esto significa que no necesariamente conducirá a problemas de salud mental,” dijo Koolhaas.
“El uso de medidas objetivas asegura que no tengamos que depender de la memoria de los participantes al completar los cuestionarios y esto hace que la medida sedentaria total sea más precisa”, continuó Koolhaas.
Sin embargo, dicho dispositivo no puede distinguir diferentes tipos de sedentarismo. Puede ser que cada tipos específico se asocie de manera diferente con la salud mental y cognitiva. “Sería muy interesante examinar la asociación con el comportamiento sedentario objetivo y subjetivo en la misma muestra, al mismo tiempo,” agregó.
Hay que resaltar que, aunque el sedentarismo podría no dañar la salud mental, estudios anteriores han demostrado que los niveles más altos de comportamiento sedentario están relacionados con diversas enfermedades, como cáncer, diabetes y enfermedades cardíacas.
Referencia bibliográfica:
Koolhaas, C. M., van Rooij, F. J. A., Kocevska, D., Luik, A. I., Arfan Ikram, M., Franco, O. H., & Tiemeier, H. (2019). Objectively measured sedentary time and mental and cognitive health: Cross-sectional and longitudinal associations in The Rotterdam Study. Mental Health and Physical Activity, Vol. 17, p. 100296. https://doi.org/10.1016/j.mhpa.2019.100296
Fuente: Psypost