Los niños que con frecuencia rompen las reglas o desafían de otra manera a sus padres, a menudo llegan a ser personas que alcanzan grandes méritos educativos y adultos con altos ingresos según una investigación. Esto ha llevado a que los autores consideren a la obstinación como un buen predictor del éxito futuro en la vida de los niños.
El estudio siguió por décadas a 700 niños de entre 8 y 12 años hasta que fueron adultos de más de 50. Se investigó la personalidad de cada participante al inicio del estudio; el equipo de investigadores buscó rasgos como estudiosidad, escrupulosidad, responsabilidad, impaciencia, inclinación a ser desafiante, entre otros. Luego, los científicos intentaron descubrir qué rasgos se tenían mayor correlación con el éxito profesional, más tarde en la vida.
Si bien el estudio no explica por qué hay una correlación tan fuerte entre los pequeños que rompen las reglas y los altos ingresos en la adultez, los autores postularon que los niños desafiantes podrían ser más competitivos en el salón de clases, lo cual podría llevar a mejores calificaciones. Como adultos, podrían ser más demandantes, por ejemplo, cuando se trata de negociaciones salariales. Puede que estén más dispuestos a pelear por sus propios intereses financieros, incluso corriendo el riesgo de molestar a amigos y colegas. A su vez, los autores no descartan una razón más bien negativa al sostienen que los niños que rompen las reglas, como adultos podrían hacer algo antiético para incrementar sus salarios.
Por supuesto que la simple terquedad no es suficiente para asegurar que los niños terminen teniendo una vida profesionalmente exitosa, pero los hallazgos de esta investigación al menos servirán para dar ánimos a todos aquellos padres que libran batallas cotidianas con hijos desafiantes y especialistas en convertir cualquier directriz paternal en una ardua negociación antes de pensar siquiera en obedecerles.
Fuente: Inc