El trastorno obsesivo compulsivo (TOC) tiene un fuerte impacto en la salud, ajuste y desarrollo de niños y adolescentes.
Se sabe que la terapia cognitiva conductual (TCC) es el tratamiento de primera linea para este diagnóstico, pero en la mayoría de los países el acceso a este tratamiento es muy limitado (hay pocos terapeutas entrenados, la mayoría atiende en consultorio privado o no hay terapeutas en zonas alejadas de la ciudad. Esto genera dos problemas: (1) los niños y sus familias no reciben tratamiento y el diagnóstico empeora afectando la salud, desarrollo, aprendizaje y ajuste del menor, o (2) reciben tratamientos sin evidencia que llevan a los padres a gastar los recursos que tengan y empeoran el cuadro de TOC.
Desde hace varios años los investigadores son conscientes de los problemas de acceso a la TCC y han buscado maneras de adaptarla, pero lo cierto es que el ritmo de las investigaciones era bastante lento. Sim embargo, con la cuarentena por COVID-19 todo cambió. El ritmo de investigaciones de las terapias en modo online se aceleró y el ejemplo más reciente sobre el TOC viene desde Suecia.
La investigación
Los investigadores del Centro de Investigación de Psiquiatría en el Karolinska Institutet llevó a cabo un estudio aleatorio controlado con 152 niños que tenían entre 8 y 17 años y que fueron evaluados con el Children’s Yale-Brown Obsessive-Compulsive Scale (CY-BOCS), una escala con 10 ítems clasificados de 0 (sin síntomas) a 4 (síntomas extremos) y que arroja un rango de puntuación total de 0 a 40 donde las puntuaciones más altas indican mayor gravedad.
Los participantes fueron divididos en dos grupos de forma aleatoria. El grupo de investigación (n=74) recibió la versión de TCC para TOC vía online durante 16 semanas. El grupo control (n=78) recibió la TCC tradicional, cara a cara, con la misma duración. Los investigadores también hicieron un seguimiento de 3 y seis meses para revisar los efectos del tratamiento.
Los resultados
Los hallazgos demuestran que la TCC online para TOC en niños es igual de efectiva que la versión tradicional, cara a cara:
- El 99% de los participantes se mantuvo durante todo el tratamiento. Lo que indica un excelente nivel de compromiso y adherencia al tratamiento. Este resultado es muy valioso porque los terapeutas suelen creer que los adolescentes y niños no se “engancharán” con la terapia online, pero no fue así.
- Ambas modalidades fueron efectivas para reducir los síntomas del TOC y la diferencia entre los puntajes fue mínima. La media fue de 11.57 puntos en la Children’s Yale-Brown Obsessive-Compulsive Scale, para los niños que hicieron TCC online y 10.54 para los que hicieron TCC presencial.
Conclusión
Hacer terapia infantojuvenil es difícil. Exige no solo conocer con precisión los principios teóricos, sino también la capacidad de amoldar los procedimientos para la comprensión y adaptación de niños y adolescentes. Tiene mucho sentido que al principio los terapeutas piensen y sientan que el formato online es un obstáculo para un buen tratamiento, pero las investigaciones han demostrado una y otra vez — en este caso en TOC con niños — que sí se puede hacer, con buenos resultados y permite llevar el tratamiento a las personas que más lo necesitan.
Referencia bibliográfica: Aspvall K, Andersson E, Melin K, et al. Effect of an Internet-Delivered Stepped-Care Program vs In-Person Cognitive Behavioral Therapy on Obsessive-Compulsive Disorder Symptoms in Children and Adolescents: A Randomized Clinical Trial. JAMA. 2021;325(18):1863–1873. doi:10.1001/jama.2021.3839
Fuente: EurekaAlert