Resumen:
La terapia de aceptación y compromiso (ACT) se está convirtiendo en una vía de intervención prometedora en los problemas psicológicos en la infancia. En el presente estudio se aborda la intervención desde ACT en un caso de un niño de 9 años (J) que muestra numerosas conductas disruptivas en el contexto familiar, especialmente en situaciones que involucran a su hermano menor, y un patrón de rumia muy extendido. Se utilizó un diseño de caso único A-B con medidas de seguimiento. Los resultados muestran una reducción clínicamente significativa de las conductas disruptivas e incremento de flexibilidad psicológica tanto en el niño como en los padres. Se presentan los principales ejercicios y metáforas que se utilizaron para incrementar la flexibilidad psicológica de J, así como la intervención realizada con los padres, tanto de cara a la gestión de sus propias barreras psicológicas como las pautas para potenciar un comportamiento más flexible en su hijo.