Sergio Parra explica en XakataCiencia los resultados de una reciente investigación publicada en JAMA Neurology que encontró que la somnolencia diurna puede ser un indicador temprano de Alzheimer:
Tras realizar varios escáneres cerebrales para detectar amiloide durante el período de estudio de siete años en personas mayores con alzheimer, descubrieron que las personas que informaron de somnolencia diurna excesiva al inicio del estudio tenían mayor probabilidad de mostrar aumentos en el contenido de amiloide en sus cerebros.
Si bien el estudio hizo todo lo posible para intentar rastrear cómo los niveles de amiloide en el cerebro cambian con el tiempo en personas con y sin somnolencia diurna, aún no proporciona una respuesta definitiva sobre si las interrupciones del sueño contribuyen a la acumulación de amiloide o si surgen problemas de sueño ello propicia que amiloide comience a acumularse.
Con todo, los hallazgos refuerzan la importancia de dormir bien y tener buenos hábitos de sueño para mantener el cerebro saludable. Sobre todo si se constata que el sueño es una forma de retrasar o incluso prevenir el Alzheimer.