El desempeño laboral suele ser un factor fundamental en la determinación del salario, el progreso profesional e incluso la satisfacción laboral. Esto, siempre que la persona cuente con oportunidades reales de ejercer sus habilidades y crecer en su profesión en pie de igualdad con sus colegas.
Solo uno de cada cinco cirujanos que ejercen en EE. UU. es mujer. El desempleo es prácticamente inexistente entre los cirujanos, pero muchas cirujanas, así como mujeres profesionales en otros campos, experimentan subempleo (entendido como la infrautilización de habilidades) según el Banco de la Reserva Federal. Un estudio reciente encontró que las cirujanas de un gran centro médico académico (el Hospital General de Massachusetts (MGH)) experimentan subempleo, lo que puede afectar su remuneración, avance profesional y satisfacción laboral (Chen et al., 2020).
Metodología
El equipo de investigación analizó 551.047 registros de casos de operaciones realizadas por 131 cirujanos en el Hospital General de Massachusetts entre 1997 y 2018. Para comparar la dificultad entre las cirugías que realizaron mujeres y hombres, utilizaron una métrica universalmente aceptada conocida como Unidad de Valor Relativo del trabajo (UVR), que mide la complejidad técnica de un procedimiento.
Hallazgos
La UVR promedio para los casos realizados por cirujanos masculinos fue de 10,8, en comparación con el 8,3 de las cirujanas, una diferencia en la complejidad del 23%. Los autores señalan que si se multiplica esto en el transcurso de un año o una carrera, la diferencia es muy grande.
El diseño del estudio descartó explicaciones comunes de por qué las cirujanas realizan procedimientos menos complejos, como su elección de subespecialidad, o que las mujeres están menos disponibles debido a compromisos familiares. El estudio tampoco encontró indicios de que el problema haya mejorado en las últimas dos décadas e indicó que el subempleo es un problema más significativo para las cirujanas con mayor antigüedad.
Se aconseja hace tiempo a las cirujanas que tomen medidas, como asistir a conferencias de capacitación en liderazgo, para ayudarles a avanzar en sus carreras. Si bien estos programas tienen valor, los autores del estudio enfatizan que las propias cirujanas no son el problema. Encontrar el enfoque correcto requerirá una comprensión más profunda del problema, por eso, el equipo de investigación se encuentra estudiando actualmente las derivaciones de nuevos pacientes recibidas por un grupo de cirujanos femeninos y masculinos.
Referencia bibliográfica: Chen, Y.-W., Westfal, M. L., Chang, D. C., & Kelleher, C. M. (2020). Under-Employment of Female Surgeons? Annals of Surgery. https://doi.org/10.1097/SLA.0000000000004497
Fuente: Science Daily