Si hay un término de psicología que a veces se usa con demasiada ligereza es el de depresión, cualquier situación puede hacer que una persona diga “estas deprimido”. Al mismo tiempo hay conductas que pueden formar parte del comportamiento normal de un sujeto pero que a simple vista pueden parecer también un síntoma de depresión.
Debemos ser muy cuidadosos con esto a la hora de hacer un juicio sobre alguien o hasta un diagnóstico. Todos somos susceptibles a confundir ciertas conductas con algo más serio de lo que realmente es.
Para poder ver la diferencia entre una depresión clínica y el temperamento de alguien, primero puede ser de ayuda conocer los síntomas de la depresión, que podes leer aquí. A continuación vas a encontrar 8 comportamientos que pueden confundirse con depresión pero ser en realidad parte del temperamento de alguien o de otra condición.
Abuso de sustancias y consumo de alcohol
Aunque el abuso de sustancias y el consumo de alcohol pueden estar relacionados con la depresión, este no siempre es el caso. Puede ser que se estén utilizando con propósitos sociales o que haya una adicción/dependencia.
Anhedonia o falta de motivación
Puede ser difícil de creer pero hay personas que tienen poca motivación y no necesariamente significa que están deprimidas, simplemente siempre han sido así. Un individuo con temperamento positivo, probablemente pierda motivación si está deprimido, pero una persona que siempre está desmotivada puede no tener depresión.
Soledad
Algunas personas disfrutamos mucho nuestro tiempo solos y esto se puede deber a varias razones: ser introvertido (donde tal vez se disfruta más pensar que socializar) o puede tratarse de personas que evitan situaciones sociales porque han experimentado discriminación, exclusión o bullying. Hay individuos para los que estar aislados no es malo, especialmente si les va a ahorrar el ser desilusionados y estar incómodos socialmente.
Deben representar un cambio con respecto al comportamiento previo del sujeto
No divertirse o emocionarse por cualquier cosa
Hay personas caracterizadas por su calma, casi nada los mueve o los saca de su estado relajado. Simplemente no son tan reactivos y no se mostrarían tan expresivos ante la noticia de un casamiento o un nuevo bebé. Las personas que son así pueden o no presentar depresión. Es clave considerar el estado de ánimo natural del individuo antes de asumir que están deprimidos.
Interés en temas oscuros
Pueden haber sujetos que se muestran interesados en la muerte, en los desafíos de la vida, en la tribulación o el dolor, incluso hay personas a las que les gusta escuchar canciones tristes (o “corta venas” como se diría en algunos lugares) u oscuras. De nuevo, esto no quiere decir que una persona este deprimida.
Conductas emocionales o reactivas
Este punto se relaciona con el anterior, ya que las personas que son pensativas y reaccionan sólo cuando es necesario suelen percibirse como pesimistas o deprimidas.
Irritabilidad
Este es uno de los síntomas más relevantes para el diagnóstico de depresión en hombres y adolescentes. Pero la irritabilidad puede deberse al temperamento y no a un estado de ánimo deprimido. De nuevo, recordemos que es importante tener en cuenta la personalidad del sujeto.
Madurez o conductas serias
No todos maduramos al mismo ritmo, a algunos les toma un poco más de tiempo que a otros volverse adultos. Los pares de las personas que actúan con madurez a veces se refieren a ellos como “deprimidos”, “viejos” o “pesimistas”. Las conductas maduras pueden ser fácilmente confundidas con depresión o pesimismo, incluso en la clínica (si mirás Modern Family, seguro que te acordaste de Manny en este punto, a quien su madre suele describir como un “alma vieja”).
Como hemos visto, es importante siempre tener en cuenta la conducta normal del sujeto antes de hacer un diagnóstico, de hecho el DSM aclara que los síntomas deben representar un cambio con respecto al comportamiento previo del sujeto.
Aparte de estas 8 conductas, hay algunas condiciones cuyos síntomas también pueden ser confundidos con los de depresión como el hipotiroidismo, los niveles bajos de azúcar, la deficiencia de vitamina D y la deshidratación, entre otras. Para leer más sobre el tema, hace click aquí.
Fuente: PsychCentral