En las neurocirugías donde el paciente debe estar despierto se requiere que éste converse y responda a estímulos visuales y verbales para identificar y proteger tejidos cerebrales relacionados a funciones como el lenguaje o la motricidad. Sin embargo, el procedimiento se dificulta a causa de la (muy comprensible) ansiedad que siente el paciente. El uso de ansiolíticos tiene sus desventajas, ya que causan sedación y perjudican el funcionamiento cortical.
Un grupo de investigadores experimentó con un método no sedativo que facilitara la tolerancia del paciente al procedimiento.
En el estudio con una paciente epiléptica, se descubrió que la estimulación eléctrica directa del haz del cíngulo anterior dorsal izquierdo evoca de manera confiable el efecto positivo y la ansiólisis (estado de relajación estando despierto) sin efectos sedantes. En este caso particular, se discontinuó totalmente la medicación ansiolítica/anestésica intravenosa.
Los científicos explican que los pacientes, aunque estén bien preparados para el tipo de cirugía, pueden entrar en pánico y comentan lo siguiente sobre la primer paciente: “Esta paciente en particular era específicamente propensa a esto por una ansiedad moderada de base. Y al despertar de la anestesia global, empezó a entrar en pánico. Cuando comenzamos su estimulación del cíngulo, inmediatamente reportó sentirse feliz y relajada, contó chistes sobre su familia y fue capaz de tolerar el proceso exitosamente.”
Se replicó el procedimiento en otros dos pacientes que no se sometieron a la cirugía, consiguiendo una respuesta ansiolítica considerable.
Se ha observado que el cortex del cínculo anterior cumple roles relacionados a una amplia variedad de funciones emocionales y cognitivas (regulación de respuestas afectivas, ansiedad y depresión, motivación para perseverar, atención al dolor físico y el estrés social, etc.). La estimulación de materia gris en el cortex del cíngulo anterior dorsal puede elicitar euforia y/o analgesia.
Según los autores, el método tal vez pueda ser utilizado en cirugías para tumores cerebrales aparte de epilepsia. Esto haría que remover tejido patológico fuera más seguro y preciso, sin dañar funciones sensoriales, lenguaje o emociones. También podría considerarse como una opción de terapia para trastornos de ansiedad, estado de ánimo y dolor.
Referencias del estudio original: Kelly R. Bijanki, Joseph R. Manns, Cory S. Inman, Ki Sueng Choi, Sahar Harati, Nigel P. Pedersen, Daniel L. Drane, Allison C. Waters, Rebecca E. Fasano, Helen S. Mayberg, Jon T. Willie. Cingulum stimulation enhances positive affect and anxiolysis to facilitate awake craniotomy. Journal of Clinical Investigation, 2018; DOI: 10.1172/JCI120110
Fuente: Science Daily