Las amistades no surgen espontáneamente, sino que necesitan de tiempo y dedicación. Un estudio reciente examinó la amistad en función del tiempo, actividades y conversaciones que comparten, y sus resultados sugieren que se necesita por lo menos 50 horas para catalogar a una persona como un “amigo casual”, 90 horas para llamarlo “amigo” y más de 200 horas para considerarlo como “mejor amigo”.
Todo estos datos provienen del estudio publicado en Journal of Social and Personal Relationships, el cual se dividió en dos partes:
En la primera parte se reclutó a 429 personas que recientemente se habían mudado a otra ciudad y se les pidió que eligieran a una persona que recientemente. Todos los participantes llenaron una encuesta sobre esta nueva relación, cuanto tiempo tenían de conocerse, qué hacen cuando salen juntos, cuanto tiempo pasaron juntos durante la última semana y durante una semana regular. También se les pidió que evaluarán la relación con esta nueva persona en una escala de cercanía y si lo consideraban un “buen amigo” o su “mejor amigo”.
En la segunda parte del estudio se le administró una escala similar a un grupo de 112 estudiantes universitarios de primer ingreso, en la que se le pidió que eligieran a dos personas nuevas que habían conocido en el campus y que llevaran un registro del tiempo que pasaban juntos durante la semana.
Al combinar los datos de ambos estudios se halló que se necesita entre 40 y 60 horas para formar una “amistad casual”, entre 80 y 100 horas para que se consideren “amigos” y más de 200 horas para que sean “buenos amigos”. Una vez alcanzada una etapa de amistad, las personas doblan o triplican el tiempo que pasan con esa persona.
Por supuesto, solo pasar tiempo con una persona no los convierte en amigos, para ello es necesario que compartan actividades de interés y disfrute mutuo como tomar un café, jugar algún tipo de juegos, pasear, compartir hobbies, etc. Lo que también significa que pasar mucho tiempo con un colega en el trabajo no forjará una relación de amistad, a menos que compartan tiempo fuera de sus responsabilidades de trabajo.
Existen muchos otros factores que se involucran en el vinculo afectivo que desarrollamos con nuestros amigos. Pero lo más fascinante del estudio es que vuelve a poner como prioridad el tiempo que pasamos con nuestros amigos. Algo que hoy en día parece cada vez más escaso y donde la mayoría de las personas dice que “no tiene tiempo”.
Referencia del estudio:
Hall, J. A. (2018). How many hours does it take to make a friend? Journal of Social and Personal Relationships, 026540751876122. http://doi.org/10.1177/0265407518761225