Adrián Mateos para Redacción Médica:
Los ministerios de Sanidad y Ciencia han exteriorizado su “baja confianza”en torno a los efectos positivos de la musicoterapia como tratamiento para la ansiedad, el estrés y la depresión. Apuntan, en este sentido, que no existe evidencia que avale la efectividad de esta práctica dadas las limitaciones y el “elevado sesgo” de los estudios que se han publicado al respecto.
En un informe sobre la eficacia y la seguridad de la musicoterapia empleada para reducir la ansiedad, el estrés y la depresión, que forma parte de la campaña de análisis de pseudoterapias#CoNprueba, Sanidad y Ciencia inciden en que las revisiones analizadas “carecen de elementos metodológicos esenciales” en torno a la esta práctica, que consiste en el uso de música para estimular cambios positivos en el estado de ánimo y el bienestar general. Al respecto, sostiene que “la evidencia en la que se sustentan los resultados positivos obtenidos está sujeta a un alto riesgo de sesgo y presenta inconsistencias”.
En Psyciencia hemos publicado algunos artículos de investigación que apoyan el uso de la musicoterapia en ciertas problemáticas y poblaciones específicas, por ejemplo en personas con Alzheimer. Sin embargo los nuevos metanálisis y revisiones sistemáticas cuestionan fuertemente la calidad de los datos presentados hasta este momento. Ese es el trabajo de la ciencia: analizar los datos y depurarlos.