Margaret Floy Washburn fue la primera mujer que llegó a alcanzar un título como doctora en psicología. Sus estudios estuvieron enfocados en el comportamiento animal además de mostrar un marcado interés en la teoría motora del desarrollo.
Una mujer fuerte con un carácter muy amable que logró abrirse paso en un mundo dominado por los hombres, llevando siempre su estandarte de lucha por la igualdad de derecho para las mujeres, principalmente en lo que concierne al acceso a la educación.
Gracias a su gran inteligencia y determinación, se convirtió en presidenta de la APA (Asociación Americana de Psicología).
“Nada en el mundo es tan convincente a las emociones como la mente de otro ser humano”, Margaret Floy Washburn.
Vida personal
Margaret Floy Washburn nació en Nueva York, en el año 1871, el 25 de julio. Creció en una familia acomodada, sin mayores problemas. Su infancia estuvo marcada por las constantes mudanzas debido al trabajo de su padre quien se desempeñaba como pastor (Iglesia anglicana) y tenía que asistir a las congregaciones que le eran asignadas.
Margaret fue la única hija de sus padres y al tener que cambiar de residencia de manera frecuente no pudo establecer relaciones de amistad duraderas con sus pares. Sin embargo, se puede especular que fue justamente esto lo que despertó su interés por los estudios, siendo siempre una alumna destacada desde que comenzó sus estudios primarios a los 7 años de edad.
Su distintivo carácter dócil contrastaba con la ferocidad de su insistencia para que le permitieran estudiar una carrera, lo que la llevó a ganarse el aprecio de muchos psicólogos de su época, llegando incluso a ser miembro de la Academia Nacional de Ciencias, siendo la segunda mujer en lograr este puesto.
Tuvo una vida muy interesante, llena de pasión por aprender y comprender la conducta tanto animal como humana. Supo sortear con éxito las vicisitudes que se presentaron en su camino, haciendo frente a la discriminación de la cual fue víctima por ser mujer.
Se dedicó a aprender, a estudiar y a enseñar, con una carrera fructífera hasta el momento de su muerte en 1939, cuando falleció en Poughkeepsie, Nueva York, en su propia casa.
Estudios
Siendo una de las mejores estudiantes, Margaret Floy Washburn al culminar sus estudios de secundaria, decide estudiar psicología, pero esto no sería nada fácil, debido a que los cánones de la época establecían que los estudios universitarios eran exclusivos para los hombres y el papel de la mujer estaba en el cuidado del hogar y la crianza de los hijos.
Pero Margaret no se dejó guiar por lo establecido y se dirigió a la Universidad de Columbia para formarse como psicóloga. La elección de esta casa de estudios se debió a que allí trabajaba James McKeen Cattell como profesor quien es uno de los psicólogos más importantes de su época.
A pesar de ser una alumna brillante y excepcional, Margaret Floy Washburn no fue aceptada en la universidad debido al hecho de ser una mujer. Pero esto no la desanimó y continuó insistiendo con fervor para que la dejaran estudiar allí.
Gracias a su constancia y dedicación, a Margaret Floy Washburn se le permitió asistir a clases pero solo podía asistir como oyente. Allí su avidez de conocimiento se hizo evidente y fue el mismo J. M. Cattell quien la incentivó a dirigirse a otra institución, la Universidad de Cornell, en donde afortunadamente sí fue aceptada.
Allí, estuvo bajo la tutela de Titchener (quien fue pieza clave en su formación como psicóloga) y realizó investigaciones de carácter experimental que le valieron la obtención de su maestría gracias a su trabajo de: ‘métodos de equivalencia en la percepción táctil’.
Todo esto llevó a Margaret Floy Washburn a continuar investigando y realizar su tesis sobre ‘influencia de las imágenes visuales en los juicios de distancia táctil y dirección’ que le ameritó su doctorado en psicología, siendo la primera mujer en lograrlo. Su trabajo se publicó en el Philosophische Studien en 1895 gracias a que su profesor lo envió.
Margaret Floy Washburn: una mujer luchadora
La vida de Margaret Floy Washburn fue marcada por su carácter justo y amable (cualidad destacada por quienes la conocieron) que buscaba siempre ser conciliador.
Gracias a su esfuerzo y trabajo arduo a pesar de los inconvenientes y contra todo pronóstico, fue aceptada como parte del club de experimentalistas como una de ellos. Un verdadero logro para la época.
Durante toda su vida continuó luchando por la apertura de los espacios científicos para las mujeres, a la vez que intentaba unificar dos corrientes dentro del estudio de la conducta humana y animal: los procesos mentales e internos (cognición y procesos emotivos) junto con la corriente conductista altamente objetiva y enfocada en lo observable.
Según Woodworth (1948) Margaret Floy Washburn fue la responsable de la edición de varios diarios en su natal Estados Unidos, destacándose el Diario Americano de Psicología, del cual estuvo a cargo durante 36 años, realizando una labor impecable. En el año de 1921 se convirtió en presidenta de la Asociación Americana de Psicología (siendo la segunda mujer en lograrlo), continuando con su loable labor.
Después de muchas trabas y dificultades, el trabajo de Margaret Floy Washburn fue reconocido por sus colegas en su época pero, a pesar de ello hoy en día se le da muy poco valor a sus aportes sin darle el mérito que se merece toda su trayectoria, no solo en lo concerniente a la psicología, sino también en la lucha por los derechos de igualdad para las mujeres.
Aportaciones a la psicología
En el año 1908 publica el título “La mente animal: un libro de texto de Psicología Comparada”, un texto en el que Margaret Floy Washburn asienta sus investigaciones acerca de la relación entre los sentidos (vista, olfato, gusto, tacto y oído) y diversas actividades.
Todo esto como resultado de numerosas investigaciones experimentales que realizó en su carrera. Para la época, este tipo de estudios se solían realizar únicamente con ratas como sujetos de prueba, pero Margaret Floy Washburn fue un paso más adelante llegando a investigar poco más de 100 especies diferentes para comprender y explicar su conducta.
Más adelante, publica su trabajo llamado: “Movimiento e imaginería mental” en el año 1917, en el que trata de explicar la conciencia y la actividad mental, llegando así a formular su teoría motora dualista. Este trabajo fue una verdadera revolución para la época, pues une dos corrientes opuestas hasta el momento, el conductismo (objetivo, experimental y de introspección) junto con los procesos cognitivos, incluyendo (sin mucho énfasis) las emociones.
Además de haber realizado aportes importantes al campo de la investigación científica de la conducta, uno de los mayores aportes de Margaret Floy Washburn fue el lograr visibilizar a la mujer dentro de los espacios académicos, marcando el camino para que otras científicas pudieran formarse dentro de un mundo que hasta entonces, había sido exclusivo del género masculino.
Referencias:
- Annin, E. L., Boring, E. G., Watson, R. I. (1968). Important psychologists, 1600–1967. Journal of the History of the Behavioral Sciences, 303–315.
- Peña, R. (2015). La influencia de las primeras psicólogas norteamericanas en la historia de la psicología. Revista de Historia de la Psicología, 36(2), 31-46.
- Pillsbury, WB (1940). Margaret Floy Washburn (1871-1939). Psychological Review, 47 (2), 99–109. https://doi.org/10.1037/h0062692SOS
- Woodworth, R. (1948). Biographical memoir of Marrgaret Floy Washburn 1871-1939. National Academy of Sciences. Vol XXV