Las madres jóvenes, particularmente las menores de 20 años, presentan más probabilidades de tener un hijo con trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH), según los hallazgos de un nuevo estudio que investigó la relación genética entre los rasgos reproductivos femeninos y seis trastornos psiquiátricos (Ni et al., 2019).
Los investigadores descubrieron que el riesgo genético del TDAH en los niños estaba fuertemente asociado con la edad materna temprana en el primer nacimiento, especialmente para las mujeres menores de 20 años.
El TDAH es un trastorno complejo del neurodesarrollo que afecta la capacidad de una persona para ejercer un autocontrol apropiado para su edad. Caracterizados por patrones persistentes de conductas desatentas, impulsivas y a veces hiperactivas, a las personas les resulta difícil concentrarse, enfocarse y regular sus emociones.
Utilizando datos genéticos de 220.685 mujeres en el Biobanco del Reino Unido, el equipo de investigación analizó las correlaciones genéticas entre cinco rasgos reproductivos femeninos:
- edad al primer nacimiento;
- edad en la primera relación sexual;
- edad a la primera menstruación;
- edad a la menopausia;
- número de nacimientos vivos;
Y seis trastornos psiquiátricos comunes: TDAH, autismo, trastornos de la alimentación, depresión, trastorno bipolar, y esquizofrenia.
El profesor asociado Hong Lee de UniSA dice que los hallazgos podrían ayudar a mejorar la salud reproductiva en las mujeres y ofrecer mejores resultados para sus hijos.
“El enfoque es doble. En primer lugar, podemos informar a las mujeres jóvenes sobre el alto riesgo genético de tener un hijo con TDAH si dan a luz a una edad temprana. Esto puede prevenir y evitar que den a luz a una edad inmadura, lo que no solo mejora su salud reproductiva sino también el entorno materno de su bebé. En segundo lugar, podemos educar a las madres jóvenes sobre las características del TDAH, como la impulsividad y los comportamientos desatentos, que pueden ayudar a reconocer mejor la condición de sus hijos y buscar tratamiento más temprano que tarde.”
“El TDAH es tratable, pero el diagnóstico temprano y las intervenciones son clave para un resultado exitoso.”
Lee dijo que si bien los hallazgos son significativos, existen algunas complejidades ocultas.
“Es importante comprender que si bien existe un vínculo genético claro entre el TDAH y las madres jóvenes, esto no es necesariamente una relación causal.” El TDAH es un trastorno altamente hereditario, lo que significa que una madre joven también puede tener los genes que afectan el riesgo de TDAH que luego hereda su hijo.
“Saber que una mujer tiene una predisposición genética para el TDAH puede registrarse en el historial médico de su familia y luego usarse para controlar su salud y la salud de su descendencia. De esta manera, podemos garantizar que tanto la madre como el bebé reciban el apoyo y la ayuda que necesitan,” concluyó.
Referencia bibliográfica:
Ni, G., Amare, A. T., Zhou, X., Mills, N., Gratten, J., & Lee, S. H. (2019). The genetic relationship between female reproductive traits and six psychiatric disorders. Scientific Reports, 9(1), 12041. https://doi.org/10.1038/s41598-019-48403-x
Fuente: Psychcentral