En nuestros días es común escuchar a quienes nos rodean hablar de diversas dificultades a la hora de entregarse al necesario descanso diario. Alrededor de un 10% de la población sufre de insomnio, donde encontramos problemas para conciliar el sueño, despertarse con frecuencia por la noche, y sentirse cansado aún cuando llega la mañana. Estos trastornos tienen un gran impacto en la salud, en el rendimiento laboral e incluso económico.
“Cuando te sientes cansado y ligeramente enfermo, tu rendimiento en el trabajo sufre”, dice Børge Sivertsen, profesor del Departamento de Psicología Clínica de la Universidad de Bergen e investigador principal en el Instituto Noruego de Salud Pública.
La apnea del sueño es un problema más severo, que afecta del cuatro a cinco por ciento de la población. Los pacientes pueden dejar de respirar durante más o menos 40 segundos varias veces durante la noche, poniendo una enorme presión sobre el corazón. Como resultado, tienen muchos micro despertares que les impiden alcanzar el sueño profundo.
Mala noche, mal día
De acuerdo con este científico del sueño, según un estudio publicado recientemente en los Estados Unidos, pone las pérdidas anuales sólo por insomnio en 63,2 mil millones de dólares al año. Sólo un tercio de esto fue debido a la ausencia real de trabajo, dos tercios fueron debidos a una pérdida de la productividad en el trabajo.
“Un estudio australiano encontró que alrededor del 2% del PBI de Australia se pierde debido a las bajas por enfermedades causadas por el insomnio y el trastorno de apnea del sueño. Esto demuestra lo comunes que son estas enfermedades y cuánto afectan al trabajo”, dice Sivertsen.
Peligro al volante
A su manera, cada trastorno del sueño también tiene un fuerte impacto en las estadísticas de accidentes. Por ejemplo, los conductores de camiones tienen trabajos sedentarios, lo que aumenta el riesgo de desarrollar obesidad y apnea del sueño.
“La enfermedad es una de las principales causas de accidentes de tráfico en las calles americanas”, Sivertsen dice.
Como para el insomnio, el consumo de drogas puede causar problemas. Los estudios de Sivertsen muestran que los sedantes pueden hacer que los usuarios se sientan menos descansado durante el día.
“La medicación del sueño puede funcionar a corto plazo, pero después de seis semanas de uso, notamos una disminución en el sueño profundo. Puede haber sueño ininterrumpido, pero no necesariamente será sueño de calidad”, dice él.
Prueba todos los tratamientos que hay
Quienes sufren de trastornos del sueño son a menudo los principales usuarios de servicios de salud, lo que lleva a un aumento de los costos sociales.
“Cuando te sientes mal, vas a intentar todos los tratamientos que hay. Hay un consumo excesivo de métodos alternativos entre los que sufren de insomnio. Suelen consumir alcohol en exceso y visitan a sus médicos, psicólogos, fisioterapeutas y quiroprácticos más a menudo.” Sivertsen quiere que el tratamiento para el insomnio sea más accesible, y que incluya la terapia cognitivo-conductual.
“Varios estudios recientes muestran que internet puede ser utilizado para ofrecer buenos y rentables métodos de tratamiento. Esto es particularmente cierto en áreas donde los centros de sueño son pocos y distantes entre sí”, sugiere él.
Este artículo fue impreso por primera vez en la revista internacional Hubro de investigación y educación de la Universidad de Bergen 2012/2013. Traducido del noruego por Sverre Ole Drønen.
Fuente: ScienceDaily.com; Universidad de Bergen.
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