Raquel Martinez Rico explica en La Mente es Maravillosa, los efectos psicológicos que aplicaron las tiendas para hacerte gastar todo el dinero que tenías y lo que no tenias en el Black Friday:
Adquirir productos rebajados produce un placer que puede llegar a anular nuestro pensamiento crítico, es decir, nuestra capacidad de raciocinio. Los expertos saben que el cerebro de los personas se ponen en “modo compra” nada más que entramos a una tienda. A partir de ese momento, es función de los dependientes hacer que tomes la decisión de comprar.
Las estrategias de que usan las grandes empresas buscan ganar clientes y conseguir vender lo que ellos quieren y al precio que han decidido. Probablemente este precio siga siendo alto, pero la estrategia consiste en que el consumidor vea que el precio inicial era mucho más alto, y ahí es donde la publicidad intenta generar de nuevo la urgencia de comprar un producto que no necesitamos.
A ti que no te conozco (o sí), probablemente acabes comprando en algún momento más de lo que necesitas. Seguramente yo también lo haga, pero al menos, conociendo lo que te he contado, lo haremos de forma consciente y lo tendremos en cuenta una vez estemos en la tienda para que “los chollos” del Black Friday no terminen por abrir un agujero en nuestra economía.