Los autores de este libro definen al análisis de conducta aplicado como la ciencia en la que las tácticas derivadas de los principios de conducta se aplican de manera sistemática con el objetivo de mejorar conductas socialmente relevantes. Además se utiliza la experimentación para identificar las variables responsables del cambio en la conducta.
La definición puede dividirse en seis partes:
- Es una ciencia, es decir que sus valores y métodos se alinean con los de las investigaciones científicas.
- Todos los procedimientos utilizados se describen de manera tecnológica y sistemática.
- Se limita solo a tácticas que se deriven conceptualmente de los principios básicos de conducta.
- Se enfoca en comportamientos socialmente significativos.
- Sus objetivos más importantes son la comprensión (5) y la mejora (6).
Dominios interrelacionados
La ciencia del análisis de la conducta tiene cuatro dominios que están interrelacionados. Es común que un analista de conducta trabaje en múltiples dominios.
Aunque cada dominio puede ser definido y practicado por separado, ninguno es completamente independiente del desarrollo de los otros, ni puede estar desinformado con respecto a los otros.
Conductismo radical
Es el dominio filosófico del análisis de la conducta. Su función es ocuparse de cuestiones teóricas y conceptuales. Un ejemplo es la exploración del interjuego de la práctica conductual y cultural que realizó Glenn en 2004.
Análisis experimental de la conducta
Es la rama de investigación básica. Dichos estudios consisten en experimentar tanto con humanos como con animales, en laboratorios. Su objetivo es descubrir, extender y clarificar principios fundamentales de la conducta. Por ejemplo, el trabajo de Mazur y Fantino (2014) sobre tomar decisiones.
Análisis de Conducta Aplicado (ABA)
En este dominio se realizan experimentos para descubrir y clarificar relaciones funcionales entre conductas socialmente relevantes y las variables que las controlan. Con estos experimentos se contribuye a desarrollar tecnologías de cambio de conducta más humanas y efectivas. Como ejemplo, podemos nombrar la investigación de Romanowich y Lamb (2015) sobre los efectos de varios horarios de reforzamiento en la abstinencia de fumadores.
Analista conductual
La realización de servicios profesionales es el último dominio. Los analistas conductuales diseñan, implementan y evalúan los programas de cambio de conducta que consisten en tácticas de cambio de conducta que se derivan de los principios fundamentales del comportamiento descubiertos por investigaciones básicas y experimentales.
Una ciencia es constante desarrollo y con mucho potencial
El conocimiento con el que cuenta ABA sobre cómo funciona la conducta está incompleto. Incluso está incompleto en relación a los principio básicos y la tecnología derivada de ellos. Sin embargo, la investigación y práctica en análisis de conducta aplicado ha mejorado el desempeño humano y la calidad de vida de los participantes en una amplia gama de áreas.
Heward y Critchfield (2019) realizaron una lista con más de 230 temas diferentes donde se ha utilizado el análisis de conducta aplicado para mejorar distintas problemáticas. Algunos temas probablemente ya te los imagines (TEA, TDAH, trastornos del aprendizaje), mientras que otros pueden sorprender. A continuación te comparto algunos: