Jerome Bruner murió el pasado 5 de junio a la edad de 100 años en su casa de Manhattan, Nueva York. Bruner fue uno de los psicólogos más importantes de nuestra era, su legado profundizó el conocimiento de la psicología en los campos de la percepción humana, el desarrollo infantil, el aprendizaje y la ciencia cognitiva.
Vida de Jerome Bruner
Jerome Bruner, proveniente de una familia judía acaudalada, nació el 15 de octubre de 1915 en Nueva York. Bruner nació ciego a causa de profundas cataratas, pero a la edad de dos años se le realizó un procedimiento quirúrgico que le devolvió la visión. A lo largo de su vida, reconoció que ese hecho guió sus trabajos sobre percepción y pensamiento.
profundizó el conocimiento de la psicología en los campos de la percepción humana, el desarrollo infantil, el aprendizaje y la ciencia cognitiva
Bruner se graduó en psicología en 1937 en la Universidad de Duke y obtuvo su doctorado en 1941 por la Universidad de Harvard. Luego de obtener su título, ingresó a las filas del ejército de Estados Unidos para servir como psicólogo en Francia durante la Segunda Guerra Mundial. En 1945, al terminar la guerra, regresó a Estados Unidos para trabajar como profesor de psicología en Harvard. Durante 1960 y 1972, Bruner fungió como director del Centro de Estudios Cognitivos. En 1972 decide dejar Harvard para aceptar el cargo de profesor de psicología experimental en la Universidad de Oxford, en Inglaterra, hasta 1980. Después de años de trabajo vuelve a Estados Unidos para trabajar en la Universidad de Nueva York como profesor de psicología.
A lo largo de su vida Bruner recibió importantes reconocimientos de la Universidad Yale, Columbia y otras casas de Altos Estudios alrededor del mundo.
Aportes de Jerome Bruner a la ciencia cognitiva y a la educación
El Dr. Bruner abrió el camino de la ciencia cognitiva debido a la insatisfacción que sentía con respecto al conductismo. Para Bruner, el conductismo ignoraba muchas dimensiones mentales que resaltan la complejidad de las personas y que la mente no es una máquina pasiva que sólo reacciona ante los estímulos. Una de las investigaciones que marcó su vida fue la que realizó en 1947 con la cual descubrió que los niños de bajos recursos percibían una moneda más grande de lo que era –según Bruner esto significaba que los deseos no sólo pueden distorsionar los pensamientos, sino también las dimensiones físicas de los objetos. Éste hallazgo demostró que en la mente intervienen motivos, instintos e intenciones que podían moldear la comprensión y percepción de las personas.
Una de sus contribuciones más importantes en el ámbito de la educación fue la del “currículum en espiral”, la cual consiste en que los maestros introduzcan diferentes temas en los primeros años de escolaridad y con lenguaje apropiado para su edad, y en los años siguientes se vuelven a ver los mismos temas pero con mayor profundidad y complejidad. Hoy esta idea se da por sentado en todos los sistemas educativos occidentales, pero en la década de los 60 marcó toda una revolución.
Una de sus contribuciones más importantes en el ámbito de la educación fue la del “currículum en espiral”
En una entrevista con The New York Times, Howard Gardner, padre de la Teoría de las Inteligencias Múltiples, reconoció la importancia de los trabajos de Bruner:
“Él fue el psicólogo de las posibilidades”, y agregó: “él fue el pensador más importante al campo educativo desde John Dewey – Hoy no hay otro como él.”
Bruner es un ejemplo a seguir para todos los psicólogos y estudiantes. La psicología necesita de hombres y mujeres que no sólo se queden con críticas a las deficiencias de los modelos actuales sino que investiguen y enriquezcan la psicología, así como lo hizo Bruner a lo largo de su vida.
Fuentes: The New York Times; Britannica