Recientemente comencé a estudiar más sobre el análisis de conducta aplicado (ABA) y, entre los mejores materiales de lectura sobre este tema se encuentra el libro de John Cooper, Timothy Heron y William Heward: Applied Behavior Analysis. Third Edition. Así que decidí compartir con todas las personas a las que podría parecerles interesante este tema, lo que voy leyendo.
En esta primer entrega, por supuesto, comenzaremos por lo más básico: Qué caracteriza a ABA como ciencia y qué es la ciencia.
El análisis de conducta aplicado es una ciencia que se ocupa de entender y mejorar la conducta de las personas. Así, se enfoca en conductas socialmente relevantes, utiliza intervenciones y técnicas basadas en la investigación y se apoya en el método científico para demostrar relaciones confiables entre la intervención utilizada y la mejora en el comportamiento.
¿Qué es la ciencia?
Los autores la definen como un acercamiento sistemático a la búsqueda y organización del conocimiento.
¿Cuál es su propósito?
El objetivo principal de toda ciencia es entender a cabalidad un fenómeno (en el caso de ABA es el cambio en la conducta socialmente relevante).
La ciencia busca descubrir verdades, es decir hechos y leyes universales. Para conseguirlo se intenta separar esto de las razones por las que se busca determinado conocimiento (personales, económicas, políticas, etc.).
Los diferentes tipos de investigación contribuyen al conocimiento en uno o más de los tres niveles de comprensión:
- Descripción: Se refiere a la observación sistemática. Consiste en la recolección de hechos que se puedan cuantificar, clasificar y examinar para buscar posibles relaciones con otros hechos. Los estudios descriptivos suelen producir hipótesis o preguntas para nuevos estudios.
- Predicción: Las observaciones repetidas pueden revelar que dos eventos suelen presentarse juntos (correlación). Un hallazgo así puede usarse para predecir la probabilidad relativa de que un evento ocurra, basándonos en la presencia del otro. En esta clase de estudios las variables no pueden manipularse o controlarse, es por eso que siempre leemos que no pueden demostrar que una de las variables observadas sea responsable de los cambios en la otra. Sin embargo, son útiles para sugerir posibles relaciones causales que deben ser exploradas en estudios experimentales.
- Control: Es cuando, al manipular una variable, conseguimos determinado cambio o logramos que la otra variable asuma ciertas características. En análisis de conducta aplicado, las relaciones funcionales son las que proveen una comprensión tal de la conducta, que luego permitirá el desarrollo de tecnologías capaces de cambiar comportamientos. Decimos que hay una relación funcional “cuando un experimento bien controlado demuestra que un cambio específico en un evento (la variable dependiente) ha sido confiablemente producido por la manipulación específica de otro evento (la variable independiente) y que es improbable que los cambios en la variable dependiente fueran producidos por factores extraños (variables de confusión)”, escriben Cooper, Heron y Heward (2019, p. 20).
Las relaciones funcionales son las bases del análisis de conducta aplicado.
Las actitudes y supuestos de la ciencia
Para conseguir su objetivo principal, las personas que trabajan en ciencia deben guiar su conducta con ciertos supuestos y valores. ¿Cuáles son?
1. Determinismo
Se asume que el universo es un lugar ordenado y regido por leyes. Todos los fenómenos ocurrirán como resultado de otros eventos. Los eventos se relacionan de forma sistemática con otros factores, los cuales también son susceptibles de ser investigados científicamente.
2. Empirismo
Es la práctica de observar objetivamente y medir los fenómenos. La palabra “objetividad” aquí se refiere a dejar de lado los prejuicios personales, las opiniones y los gustos. La observación objetiva se basará en descripciones detalladas, medidas sistemáticas y repetidas y cuantificación precisa de un fenómeno.
Este es un punto en el que los analistas de conducta hacen mucho hincapié: Todo esfuerzo por entender, predecir y mejorar conductas depende de la habilidad del analista para definir de forma completa, observar sistemáticamente y medir de forma precisa y confiable la ocurrencia o no ocurrencia de una conducta.
Cuando hay una correlación entre eventos, podría existir una relación funcional, pero también podría haber otros factores que influyan en la variable dependiente. Para explorar esto, se debe realizar un experimento en el que los factores que podrían estar causando el cambio sean sistemáticamente controlados y manipulados, mientras que los efectos en la variable dependiente son cuidadosamente observados.
3. Replicación
El conocimiento conseguido a través de la ciencia, será considerado como útil y confiable en la medida en que se haya podido replicar varias veces, con el mismo patrón básico de resultados.
Si bien no hay un número específico de veces en que se debe replicar un estudio, mientras más importante sea el hallazgo para la teoría o práctica, más veces debería ser replicado.
4. Parsimonia
Viste cuando le comentas, preocupada, al técnico que la televisión no anda y él te dice: “¿Te fijaste si está enchufada?” Bueno, la idea de la actitud de parsimonia es que todas las explicaciones simples y lógicas para un fenómeno deben ser descartadas, experimental o conceptualmente, antes de considerar explicaciones más complicadas o complejas.
Una interpretación parsimoniosa solo cuenta con aquellos elementos que son necesarios y suficientes para explicar un fenómeno. Esta ley se deriva de la navaja de Ockham, que declara que no debemos ponerles más elementos de los absolutamente necesarios a las explicaciones.
5. Duda filosófica
En ciencia, los hechos deben ser continuamente cuestionados y el conocimiento siempre debe ser visto como tentativo. Esto es especialmente difícil cuando eres tú quien ha hecho el descubrimiento, pero siempre se debe tener la disposición a dejar de lado esos hallazgos y reemplazarlos con conocimientos que se deriven de nuevos hallazgos.
Los analistas conductuales también deben ser escépticos en la práctica diaria.
6. Otros valores y actitudes importantes
Para que el conocimiento sea de la mejor calidad y veamos progreso, en la ciencia debe reinar la curiosidad, la diligencia, la ética, la perseverancia, la honestidad y la minuciosidad.
Referencia: Cooper, J. O., Heron, T. E., & Heward, W. L. (2019). Applied Behavior Analysis (3rd Edition, Global edition). Pearson.