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Una buena noticia para los amantes de los hongos. Una reciente investigación encontró que los adultos mayores que incluyen setas en sus comidas con regularidad, tienen menos riesgos de sufrir de problemas cognitivos.
El deterioro cognitivo leve afecta la memoria, lenguaje, atención y habilidades visioespaciales. No es un deterioro discapacitante y las personas usualmente pueden llevar las actividades diarias, lo que hace que sea difícil de detectar para sus amigos y familiares.
Para evaluar si el consumo de hongos ofrecía algún efecto protector los investigadores utilizaron una batería de tests neuropsicológicos, entrevistas estructuradas, analizaron la historia médica, factores psicológicos y, por supuesto, los hábitos alimenticios de 60 adultos mayores chinos que vivían en Singapur.
Después de realizar un seguimiento por seis años de los resultados, los investigadores encontraron que los adultos mayores que consumían más de dos porciones estándar de setas a la semana tenían menos de 50% probabilidades de desarrollar un deterioro cognitivo moderado.
Cada porción estándar fue definida como 150 gramos de hongos. Dos porciones equivaldría a comer medio plato de hongos a la semana.
Los investigadores creen que el efecto protector cognitivo se encuentra en la ergotioneina, un antioxidante y anti-inflamatorio, que se encuentra en casi todas las variedades de hongos y que los humanos somos incapaces de sintetizar por nuestra cuenta.
Los hongos son un manjar bastante versátil que pueden preparar en una amplia variedad de platos. Si no son de tu agrado te recomiendo darle una nueva oportunidad, quizás te ayude a ampliar tu paladar y al mismo tiempo proteger tu cerebro. Aquí tienes algunas ideas para prepararlos.
Referencia del estudio original: Lei Feng, Irwin Kee-Mun Cheah, Maisie Mei-Xi Ng, Jialiang Li, Sue Mei Chan, Su Lin Lim, Rathi Mahendran, Ee-Heok Kua, Barry Halliwell. The Association between Mushroom Consumption and Mild Cognitive Impairment: A Community-Based Cross-Sectional Study in Singapore. Journal of Alzheimer’s Disease, 2019; 1 DOI: 10.3233/JAD-180959
Fuente: ScienceDaily
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3 comentarios
Definitivamente es algo que considerar, el alimento en general afecta las emociones y conducta del ser humano. Excelente artículo y gracias por compartir.
Gracias por comentar :)
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