Impresionante y emotiva historia de resiliencia escrita en primera persona, por Lary León:
Nací sin brazos y con una sola pierna. Eso ha provocado que, desde mi niñez, haya tenido que enfrentarme a miradas de susto, compasión o sorpresa. Y, la verdad, nunca le he concedido mayor importancia: he preferido verme, por la forma de mi cuerpo, como una sirena. Esta es la historia de cómo, en mis 43 años, mi familia y yo decidimos transformar cada obstáculo en una fuerza positiva.
Una historia de vida que nos demuestra que podremos afrontar nuestras adversidades siempre y cuando seamos capaces de ver las cosas desde otra mirada: