Estudio reciente encontró alto riesgo de infección grave por COVID-19 entre los participantes de ascendencia europea que llevan dos copias defectuosas del gen APOE (denominado e4e4) (Kuo et al., 2020). El estudio fue realizado por investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de Exeter y la Facultad de Medicina de la Universidad de Connecticut, quienes realizaron análisis de datos del Biobanco del Reino Unido que recopila datos de salud y genéticos de 500,000 personas.
Señalan otras investigaciones que una de cada 36 personas de ascendencia europea tiene dos copias defectuosas de este gen, que aumenta el riesgo de enfermedad de Alzheimer hasta 14 veces y también aumenta el riesgo de enfermedad cardíaca.
Según el nuevo estudio, portar estas mutaciones genéticas duplica los riesgos de COVID-19, incluso en personas que no habían desarrollado otras enfermedades.
El equipo descubrió anteriormente que las personas con demencia tienen tres veces más probabilidades de tener COVID-19 grave, sin embargo, no son uno de los grupos anunciados como más vulnerables por motivos de salud. Parte del mayor efecto de riesgo puede haber sido la exposición a la alta prevalencia del virus en hogares de cuidado. Sin embargo, lo que resalta esta investigación es que también puede estar en juego un componente genético.
La mayoría de las personas en la población y en el tamaño de la muestra aún no se han expuesto al virus. En este análisis, el 2,36% (n = 9.022) de los participantes con ascendencia europea (n = 382.188) tenían el gen defectuoso ApoE e4e4, pero el 5,13% (n = 37) de los que dieron positivo para COVID-19 (n = 721) tenía esta variante genética, lo que sugiere que el riesgo se duplica en comparación con el gen e3e3 (410 por 100,000 versus 179 por 100,000).
La relevancia de estos hallazgos también es destacable porque muestra, nuevamente, que “el aumento de los riesgos de enfermedades que parecen inevitables con el envejecimiento en realidad podría deberse a diferencias biológicas específicas, lo que podría ayudarnos a comprender por qué algunas personas se mantienen activas hasta los 100 años o más, mientras que otras quedan discapacitadas y mueren en sus sesenta años,” señaló la Dra. Chia-Ling Kuo, coautora del estudio.
El profesor David Melzer, quien dirigió el equipo, dijo: “Varios estudios han demostrado que las personas con demencia tienen un alto riesgo de desarrollar COVID-19 grave. Este estudio sugiere que este alto riesgo puede no ser simplemente debido a los efectos de la demencia, edad avanzada o fragilidad, o exposición al virus en hogares de cuidado,” concluye el profesor David Melzer, quien dirigió el equipo de investigación. Y enfatiza finalmente en que “el efecto podría deberse en parte a este cambio genético subyacente, que los pone en riesgo tanto de COVID-19 como de demencia.”
Referencia bibliográfica:
Kuo, C.-L., Pilling, L. C., Atkins, J. L., Masoli, J. A. H., Delgado, J., Kuchel, G. A., & Melzer, D. (2020). APOE e4 genotype predicts severe COVID-19 in the UK Biobank community cohort. The Journals of Gerontology. Series A, Biological Sciences and Medical Sciences. https://doi.org/10.1093/gerona/glaa131
Fuente: Science Daily