Existe suficiente evidencia del impacto que tiene la exposición al ozono en la salud física, pero un equipo de investigación quiso saber si se podría vincular también al desarrollo de síntomas depresivos en población adolescente.
Si bien los factores que afectan la depresión en los jóvenes se han investigado ampliamente, el efecto del entorno físico se ha ignorado en gran medida. Esta investigación busca cerrar esa brecha al explorar el efecto de vivir en un área con alta exposición al ozono, debido al papel del ozono como contaminante.
Método
Para su estudio, la investigadora principal, Erika Manczak, y sus colegas recopilaron datos en 3 ocasiones durante 4 años, utilizando 213 participantes de entre 9 y 13 años para la primera ocasión (para la última se mantuvieron 125 participantes). Los investigadores utilizaron datos compilados por la EPA de California para determinar los niveles de ozono y los datos del censo de EE. UU. para determinar los niveles de pobreza, los residentes con diploma menor al de escuela secundaria y los residentes que son elegibles para trabajar pero están desempleados. Los participantes completaron medidas sobre eventos estresantes de la vida, demografía y salud mental.
Resultados
Los resultados mostraron que los adolescentes que vivían en áreas con niveles más altos de ozono mostraban más síntomas depresivos que los adolescentes que vivían en áreas con niveles más bajos de ozono.
Esta relación se mantuvo incluso cuando los niveles de ozono eran más bajos que el estándar nacional. La asociación entre el ozono y los síntomas depresivos fue más fuerte para los síntomas de retraimiento/depresión que para los síntomas de ansiedad/depresión. La relación entre la exposición al ozono y la depresión es especialmente significativa para los jóvenes y adolescentes, ya que son un grupo que suele pasar mucho tiempo al aire libre.
Limitaciones del estudio
Este estudio avanzó en la comprensión del impacto potencial del ozono en la salud mental. A pesar de esto, hay limitaciones a tener en cuenta:
- Debido a la naturaleza de los datos, es imposible inferir causalidad a partir de los resultados.
- La adolescencia es un período de tiempo en el que muchas personas comienzan a experimentar depresión por primera vez, lo que dificulta identificar al ozono como un factor contribuyente importante.
- Por último, este estudio no tuvo en cuenta cuánto tiempo pasaron los participantes al aire libre, lo que podría cambiar su exposición al ozono.
Referencia del estudio: Manczak, E. M., Miller, J. G., & Gotlib, I. H. (2022). Census tract ambient ozone predicts trajectories of depressive symptoms in adolescents. Developmental Psychology, 58(3), 485–492. https://doi.org/10.1037/dev0001310
Fuente: Psypost