Una nueva investigación empírica apoya una de las teorías clave del psicoanálisis: el vínculo entre los conflictos inconscientes y los síntomas de ansiedad consciente.
Este experimento logró relacionar las neurociencias y el psicoanálisis. Algo que tal vez muchos psicoanalistas nunca hubieran imaginado, y podría tener las pistas para el soporte científico de una de las principales teorías del psicoanálisis.
En la 101 Conferencia anual de la Asociación Psicoanalítica Americana, en la Universidad de Michigan, el profesor Howard Shevrin (profesor emérito de psicología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Michigan), presentó nuevos datos que soportan un vínculo causal entre el concepto psicoanalítico del conflicto inconsciente y los síntomas experimentados por las personas con trastornos de ansiedad, como por ejemplo las fobias.
El Estudio
La investigación involucró a 11 sujetos con trastornos de ansiedad, que habían recibido tratamiento psicoanalítico. En esas terapias los psicoanalistas infirieron sobre los posibles conflictos inconscientes que podrían causar los trastornos de ansiedad de los pacientes. Se seleccionaron de las entrevistas las palabras que reflejan la esencia de los conflictos inconscientes y se utilizaron como estímulo en el laboratorio. También se seleccionaron las palabras relacionadas con la experiencia del paciente y los síntomas del trastorno de ansiedad. Aunque esas palabras difieren entre los pacientes, los resultados demostraron que funcionaban de la misma forma.
Estos estímulos verbales fueron presentados de forma subliminal por una milésima de segundo y en forma supraliminal por 30 milisegundos. Se agregó también una categoría de estímulos de control y estaba conformado por palabras que no tenían relación con los conflictos inconscientes o los síntomas de ansiedad. Los sujetos tenían electrodos conectados mientras el estímulo era presentado a los pacientes, de esta forma los investigadores podían medir la respuesta de los sujetos ante estos estímulos.
El Dr. Shevrin sostuvo “Lo que los analistas recolectaron de las sesiones tiene completo sentido solamente de forma inconsciente.”
Para obtener resultados, Shevrin les presentó los estímulos subliminales justo antes de los estímulos conscientes; se median las ondas alfas a una frecuencia de 8-13 ciclos por segundo, que ya se había demostrado que inhiben varias funciones cognitivas. Se registraron altas correlaciones en las ondas alfa, entre el estímulo subliminal y el síntoma consciente, pero solo cuando el estímulo inconsciente fue presentado de forma subliminal. No se obtuvieron resultados cuando se reemplazaron los estímulos con las palabras del grupo control. De hecho estos resultados son una función de la inhibición. Desde la óptica psicoanalítica esto sugiere que la represión puede estar involucrada.
“Estos resultados crean un argumento irrefutable de que los conflictos inconscientes causan o contribuyen a los síntomas que experimentan los pacientes con trastornos de ansiedad” dijo Shevrin.
“Estos descubrimientos y los métodos interdisciplinarios utilizados que incluyen psicoanálisis, psicología cognitiva y las neurociencias demuestran que es posible desarrollar una ciencia interdisciplinaria, basándose en la teoría psicoanalítica”.
El reconocido crítico del psicoanálisis y de la teoría freudiana, profesor de Epistemología en la Universidad de Pittsburgh, Adolf Grunbaum, dijo estar satisfecho con los nuevos resultados, que demuestran que los conceptos fundamentales del psicoanálisis pueden ser analizados desde métodos empíricos.
Por más de 40 años, Shevrin y su equipo han relacionado las disciplinas de las neurociencias, la psicología cognitiva y el psicoanálisis, buscando evidencia de los conceptos Freudianos, tales como el inconsciente y la represión. Demostrando que pueden ser documentados a través de medidas físicas de la actividad cerebral. Su trabajo ha explorado el territorio donde la neurobiología, los pensamientos, las emociones y la conducta se encuentran.
En 1968 publicó la primera investigación científica sobre las respuestas cerebrales a estímulos visuales inconscientes, lo que provee una fuerte evidencia objetiva sobre la existencia del inconsciente, en tiempos cuando la mayoría de científicos son escépticos a las ideas de Freud.
En el mismo estudio, demostró que la percepción inconsciente es procesada de forma diferente en comparación a la percepción consciente: un descubrimiento que es consistente con la mirada de Freud sobre cómo el inconsciente trabaja.
En años recientes, Grunbaum y Shevrin exploraron la naturaleza de la evidencia sobre la existencia y el impacto de los conflictos inconscientes. En 1992, cuando Shevrin publicó uno de sus primeros estudios, Grunbaum dijo estar de acuerdo con Shevrin, quien aseguró obtener una evidencia basada en la neurobiología sobre la existencia de conflictos inconscientes. Pero Grunbaum enfatizó que aquel no mostró que esos conflictos inconscientes fueran causa de los síntomas psiquiátricos. Al recibir los resultados de la nueva investigación de Shevrin, Grunbaum le respondió por e-mail: “Estoy satisfecho”.
Personalmente creo que más allá de la aceptación o críticas de los resultados de este estudio, esta investigación nos incentiva a todos los Psicólogos (sin importar qué corriente elijan) a adquirir profundos conocimientos de investigación en neurociencias, estadísticas y ciencias duras. Ha llegado el momento preciso para descartar el preconcepto de que las ciencias empíricas no son útiles para la psicología y especialmente para la psicología clínica.
Fuente: University of Michigan
2 comentarios
ME GUSTA MUCHO ES CONSTRUCTIVA ESTA PAGINA…FELICITACIONES Y DESEO QUE ME ACTUALICEN TEMAS JORNADAS CONGRESOS Y BIBLIOGRAFIA TEMAS EN EL CUAL YO TRABAJO EL JOVEN Y LA SOCIEDAD
Muchas gracias Mercedes por tu comentario. Aportes como el tuyo, nos hacen seguir mejorando y presentando contenido interesante y relevante. Esperamos seguir recibimiento tus opiniones. saludos!!!
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