El volumen del cerebro no tendría un vínculo relevante con el Coeficiente Intelectual. En cambio, su estructura e integridad parecen ser más importantes como una base biológica del CI, sugiere un estudio publicado en Neuroscience and Biobehavioral Reviews.
Un equipo internacional de investigadores, conducido por Jakob Pietschnig, Michael Zeiler, y Martin Voracek, de la facultad de Psicología de la Universidad de Viena, junto a Lars Penke (Universidad de Göttingen) y Jelte Wicherts (Universidad de Tilburg), realizaron un meta-análisis que examina las correlaciones entre el volumen cerebral in-vivo y el Coeficiente Intelectual. Basados en los datos de 148 muestras que comprenden más de 8000 participantes, reportaron una asociación robusta pero débil entre el tamaño del cerebro y el CI. Esta asociación parece ser independiente del sexo y la edad del participante.
Jakob Pietschnig, del Instituto de Psicología Aplicada de la Universidad de Viena, explica que: “la asociación observada significa que el volumen del cerebro juega solo un rol menor al explicar el desempeño de los humanos en los tests de CI.” Y aclara que si bien se observa cierta asociación, “el volumen del cerebro parece ser sólo de una pequeña relevancia práctica. Más bien, la estructura e integridad del cerebro parecen ser más importantes como una base biológica del CI, mientras que el tamaño del cerebro funciona como uno de los muchos mecanismos compensatorios de las funciones cognitivas.”
Las diferencias en la estructura del cerebro parecen ser mayormente las responsables de las diferencias entre especies en cuanto al desempeño cognitivo. Entre los Homo sapiens, hay indicaciones que dan una asociación más grande entre el CI y el volumen del cerebro igualmente cuestionables. Por ejemplo, las diferencias en el tamaño del cerebro entre hombres y mujeres están bien establecidas, dando, en comparación, cerebros más grandes a los hombres que a las mujeres. Sin embargo, no hay diferencias en el desempeño global en tests de CI entre hombres y mujeres. Otro ejemplo son los individuos con síndrome de megalencefalia (volumen cerebral aumentado) quienes típicamente presentan un rendimiento inferior al de la población promedio en los tests de CI.
“Por lo tanto, los aspectos estructurales parecen ser más importantes para el desempeño cognitivo entre los humanos también,” concluye Pietschnig.
Fuente: ScienceDaily