INFOCOP compartió una versión resumida de la declaración del a Sociedad Británica de Psicología sobre las condiciones de trabajo de los pilotos y los factores que incrementan el riesgo de desarrollar un trastorno mental. Lo que hace urgente la participación de psicólogos cualificados en el área aereoespacial:
Los autores ponen de relieve la necesidad de que la industria de la aviación invierta en su infraestructura y en el bienestar de su personal laboral, de cara a satisfacer la creciente demanda de viajes aéreos y garantizar que la seguridad no se vea comprometida, siendo la aplicación de la Psicología y la incorporación de psicólogos cualificados, una parte integral de esta inversión.
Tal y como señala el texto, el personal de aviación trabaja en un entorno único y soporta una amplia gama de factores estresantes, tanto personales -enfermedades, duelo, dificultades matrimoniales y familiares, etc.-, como relacionados con el trabajo -jornadas irregulares y de larga duración, desfases horarios, problemas de sueño, emergencias médicas durante el vuelo, descanso insuficiente entre turnos, incertidumbre laboral, etc.-, que pueden aumentar de forma exponencial el riesgo de desarrollar un problema de salud mental (principalmente, ansiedad y depresión), por lo que es crucial una evaluación regular, y que los programas educativos y las opciones de intervención estén disponibles para todos.
De hecho, según afirman los autores, la mayor parte de la información actual con respecto a la prevalencia de las condiciones de salud mental en los pilotos de líneas aéreas proviene de investigaciones de accidentes aéreos, exámenes médicos e informes de compañías aéreas o de organismos reguladores. Con respecto a las revisiones médicas, los datos muestran que las condiciones de salud mental suelen ser secundarias a las enfermedades cardiovasculares y se erigen como una de las principales razones para perder una licencia médica. Sin embargo, los autores advierten, “es probable que estas cifras subestimen la verdadera incidencia de problemas de salud mental en los pilotos de líneas aéreas”, dada la reticencia de estos a divulgar un problema de esta índole por el estigma asociado al mismo y/o por temor a perder sus licencias de vuelo.
Atendiendo a lo anterior, el documento afirma que la prevención e identificación de las condiciones de salud mental antes de que lleven a una crisis, podría lograrse si las aerolíneas implementaran el seguimiento y el apoyo psicológico de alta calidad a los pilotos y, cuando sea conveniente, una evaluación psicológica por parte de profesionales adecuadamente cualificados (esto es, que cuenten con los requisitos de formación y experiencia adecuados), junto con políticas para la mejora psicológica del personal laboral y la promoción de un óptimo bienestar.