El cerebro prioriza la información amenazante por sobre otro tipo de información, pero en personas muy ansiosas, este sesgo de atención puede volverse exagerado y perjudicial. Un nuevo estudio ha identificado cambios neuroplásticos en la estructura cerebral que acompañan al entrenamiento de modificación del sesgo de atención en personas muy ansiosas (Carlson et al., 2022).
La modificación del sesgo de atención tiene como objetivo reducir los sesgos de atención desadaptativos a la amenaza, lo que a su vez reduce los síntomas de ansiedad. Se busca entrenar sistemáticamente la atención lejos de los estímulos amenazantes y hacia los estímulos neutrales. Los investigadores señalan su interés tanto en el sesgo atencional a la información afectiva desde una perspectiva adaptativa (p. ej., detectar y prestar atención a la amenaza en el entorno) como desadaptativa (p. ej., un sesgo atencional exagerado a la amenaza, que es característico de los trastornos de ansiedad).
Qué metodología usaron
Investigaciones anteriores han indicado que la modificación del sesgo de atención es más efectiva entre las personas ansiosas que exhiben un mayor sesgo de atención a la amenaza. Con esto en mente, los investigadores seleccionaron participantes para que tuvieran altos niveles de ansiedad y cierto nivel de sesgo atencional. La muestra se compuso con 61 mujeres diestras de entre 18 y 38 años, quienes fueron asignadas al azar para completar 6 semanas de modificación del sesgo de atención o un tratamiento de control usando su teléfono inteligente.
El objetivo del estudio fue determinar cómo cambia el cerebro después del entrenamiento de modificación del sesgo de atención y cómo estos cambios en el cerebro se relacionan con la reducción de los síntomas después de la modificación del sesgo de atención.
Qué encontraron
Usando imágenes de resonancia magnética, los investigadores observaron diferencias en la estructura y función del cerebro entre aquellas que completaron el tratamiento de modificación del sesgo de atención y las que completaron el tratamiento de control. En particular, quienes completaron el tratamiento de modificación del sesgo de atención mostraron aumentos en el volumen de materia gris en la corteza cingulada anterior, una región del cerebro relacionada con la ansiedad y los trastornos del estado de ánimo. También encontraron aumentos en la conectividad funcional entre la circunvolución frontal superior y la corteza cingulada anterior, así como la ínsula.
Es importante destacar que el aumento de los niveles de volumen de materia gris de la corteza cingulada anterior se relacionó con una disminución de la ansiedad después del tratamiento de modificación del sesgo de atención.
Los autores destacan tres conclusiones principales:
- Las intervenciones como la modificación del sesgo de atención que se utilizan para abordar los síntomas de la psicopatología, parecen ‘reconectar’ (o cambiar) la estructura y la función del cerebro;
- Estos cambios parecen estar vinculado a regiones tradicionalmente involucradas en la respuesta emocional y el control cognitivo, y
- Los individuos con los cambios más grandes en la estructura cerebral son aquellos con la mayor disminución en los síntomas ansiosos (es decir, el grado en que los cambios en la estructura cerebral están relacionados con la eficacia de la intervención de modificación del sesgo de atención).
Dentro de las limitaciones del estudio señalan que las participantes tenían altos niveles de rasgo de ansiedad, lo que captura la tendencia general a experimentar ansiedad. Sin embargo, esto es diferente a un diagnóstico de trastorno de ansiedad. Por lo tanto, aunque los resultados sugieren que los cambios en la estructura y la función del cerebro acompañan a la modificación del sesgo de atención en individuos con alto rasgo de ansiedad, no está claro si estos hallazgos se generalizan a muestras clínicamente ansiosas.
Además, la intervención de modificación del sesgo de atención no redujo la ansiedad en toda la muestra, es decir que no todos parecían beneficiarse con la intervención. Sin embargo, los datos sugieren que aquellos con mayores cambios en la estructura cerebral tienen más probabilidades de experimentar reducciones en los síntomas de ansiedad.
Referencia bibliográfica: Carlson, J. M., Fang, L., Koster, E. H. W., Andrzejewski, J. A., Gilbertson, H., Elwell, K. A., & Zuidema, T. R. (2022). Neuroplastic changes in anterior cingulate cortex gray matter volume and functional connectivity following attention bias modification in high trait anxious individuals. Biological Psychology, 172, 108353. https://doi.org/10.1016/j.biopsycho.2022.108353
Fuente: Psypost