Una buena noticia para los amantes del té, del verdadero té. Una investigación de la Universidad de Singapur encontró que el consumo diario de está popular infusión podría reducir drásticamente el riesgo de desarrollar algún tipo de demencia.
La investigación asiática de tipo longitudinal se desarrolló con 957 adultos mayores de 55 años de edad que consumían frecuentemente té. La información sobre su consumo se obtuvo entre los años 2003 y 2005. Todos los participantes fueron sometidos a pruebas de desempeño cognitivo en intervalos de 2 años hasta el 2010. También se recogió información sobre su estilo de vida, condiciones médicas, actividad física y social. Todos estos factores fueron controlados para evitar efectos extraños en los resultados.
Las buenas noticias no terminan ahí. Según los autores, no tenemos que comprar una hoja rara de té, de esas gourmet importadas y caras para aprovechar los efectos protectores del té, ya que cualquier taza de té que haya sido hervida directamente de las hojas de té negro o verde funcionará perfectamente.
sus resultados pueden ser aplicados a cualquier parte del mundo
Pero la investigación se desarrolló con una población especifica de adultos mayores en Asia. ¿Aplica para otras culturas también?
Aunque el estudio fue realizado en China, donde las diferencias alimenticias y sociales son muy diferentes, los autores explican que sus resultados pueden ser aplicados a cualquier parte del mundo y que este método sencillo y económico podría proteger a millones de personas, considerando que el té es uno de los brebajes más consumidos del mundo.
¿Cuáles son los compuestos químicos de té que nos protegen del deterioro cognitivo?
Los compuestos bioactivos en las hojas de té como las catequinas, teaflavinas y la Teamina L, son compuestos antinflamatorios y antioxidantes que protegen al cerebro del daño vascular y la neurodegeneración. Todavía no se entiende completamente cómo funcionan estos compuestos en nuestro organismo y será necesario que hayan más estudios que profundicen nuestro entendimiento en un compuesto muy fácil de conseguir y de bajo costo como el té.
Creo que es una buena oportunidad para tomar menos café y probar con el té.
La investigación completa está disponible en la revista The Journal of Nutrition, Health & Aging.
Fuente: ScienceDaily