En 1998 Daniel J. Simons y Daniel Levin publicaron The Door Study, un estudio – bastante divertido – que documenta nuestra incapacidad para detectar cambios visuales mientras participamos en una interacción social.
El experimento consistió en crear una situación bastante común en la que una persona le pide ayuda a un peatón con las direcciones de un mapa. Los investigadores interrumpen la conversación durante unos segundos al pasar con una puerta en brazos y reemplazaron a escondidas a la persona que había pedido indicaciones. Sorpresivamente sólo el 50% de las personas detectaron el cambio y eso dependía si la persona pertenecía al mismo grupo social.
En una segunda parte de la investigación los autores exploraron el efecto que tenía el grupo social en la detección del cambio y descubrieron que siempre que el significado de la escena no cambie, las personas tendrán dificultades para detectar cambios en los objetos, incluso cuando ocurren en una interacción natural.
Referencia del estudio original: Simons, D.J. & Levin, D.T. Psychonomic Bulletin & Review (1998) 5: 644. https://doi.org/10.3758/BF03208840
Puedes descargar el paper completo en formato PDF.
Gracias a Pablo Malo Ocejo por compartir el video de la investigación en su cuenta de Twitter.