Hace dos años publiqué un artículo que resumía los datos de las principales investigaciones científicas sobre los daños que provoca a corto y largo plazo cualquier tipo de castigo físico a la salud de los niños.
Ahora quiero compartir información gráfica que permite entender qué tan común es esta práctica alrededor del mundo y datos históricos y socioculturales que pueden ayudarnos a entender qué tipos de intervenciones podríamos implementar para abordar esta problemática.
Todos los datos han sido extraídos de Our World In Data. La mayoría de los gráficos cuenta con la opción de agregar los países que deseas visualizar. Para hacerlo solo debes hacer click en el botón select countries.
Qué es la disciplina violenta
La disciplina violenta está compuesta por dos formas de violencia:
Castigo físico: La UNICEF define a la disciplina física, también conocida como “castigo corporal“ cómo cualquier tipo de castigo en el que se usa la fuerza física para causar cualquier grado grado de dolor o incomodidad. Incluye, por ejemplo: pellizcar, azotar, golpear a los niños con la mano u obligarlos a comer algo.
Violencia psicológica: Cualquier tipo de agresión verbal, amenaza, intimidación, denigración, ridículo, humillación o manipulación para controlar la conducta de los niños.
La disciplina violenta es una violación a la Convención sobre los Derechos del Niño firmada en 1989 por los países integrantes de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Qué tan común es la disciplina violenta
El castigo corporal y la violencia psicológica son los principales tipos de disciplina violenta. El siguiente gráfico muestra el porcentaje de niños entre 2-14 años que han experimentado cualquier tipo de disciplina violenta en su casas durante el último mes. Los datos provienen de la base de datos de la UNICEF (2016).
Niveles de disciplina violenta según el nivel económico de los países
Los datos sugiere que la disciplina violenta es levemente menos común en los países con mejor situación económica.
El castigo físico y la violencia psicológica van de la mano
Los datos demuestran que en la mayoría de los países los niños sufren de ambos tipos de disciplina violenta.
Disciplina violenta contra los niños y niñas
La disciplina violenta es un poco más usada contra los niños que las niñas. Sin embargo, las diferencias no son muy grandes y en los países donde la disciplina violenta es común, los niños y niñas son igualmente afectados. Este gráfico muestra las diferencia países.
Percepción de los padres acerca de la disciplina violenta
No se tienen datos internacionales y a largo plazo sobre las percepciones de los padres acera de la disciplina violenta. Solo se cuenta con los datos obtenidos por Estados Unidos, quienes han recopilado información durante las últimas tres décadas sobre las percepciones de los padres sobre la disciplina violenta. Los datos presentados en este gráfico muestran que cerca de dos tercios de los padres padres estadounidenses están de acuerdo con la afirmación “A veces un niño solo necesita una buena y dura nalgada”. Como muestra el gráfico, a pesar de que este número es alto, ha habido una reducción importante durante las últimas tres décadas en esta creencia.
La disciplina violenta es un problema grave que atenta contra el bienestar y salud de los más vulnerables, los niños. Y cada vez que alguien dice “a mi me pegaron y no me pasó nada.”, se perpetua un método coercitivo que no sirve para mejorar o resolver los problemas de conducta, sino que los incrementa y le enseña a los niños que al final de cuentas es valido usar la violencia cuando se sienten abrumados. Como psicólogos tenemos que manifestarnos con una sola voz, explicando con evidencia científica porqué los padres no deben pegarle a sus hijos y cuales son los métodos apropiados y efectivos para modificar las conductas problemáticas.
Artículos relacionados con gráficos:
Fuente: Our World In Data