Todos conocemos esa ansiedad que sentimos cuando nos enfrentamos a un examen de matemáticas. La panza nos incomoda, la boca reseca, nos tiembla la voz e incluso nuestro cerebro siente dolor. Así de ansiosos nos pone las matemáticas. El estudio fue diseñado por investigadores de la Universidad de Chicago y publicado en la revista académica y gratuita Plos one. Puedes leer el artículo completo aquí.
Son las mismas áreas del cerebro que registran la amenaza al daño corporal y en algunos casos el dolor físico
(Artículo relacionado: El estrés cotidiano contrae nuestro cerebro)
Utilizando imágenes cerebrales los científicos pudieron detectar las áreas que se activan cuando estamos altamente ansiosos por las matemáticas y determinaron que son las mismas áreas del cerebro que registran la amenaza al daño corporal y en algunos casos el dolor físico.
Sorprendentemente, los investigadores encontraron que era la anticipación por realizar cálculos matemáticos y no hacer matemática lo que provocaba la respuesta de dolor en el cerebro.
“La activación cerebral no sucedía durante el desempeño matemático, lo que nos sugiere que no es la matemática en sí lo que provoca el dolor, sino más bien es la anticipación la que es dolorosa.” sostuvo Ian Lyons, Doctor en Psicología en la Universidad de Ontario, Canadá.
El estudio y sus resultados
Para realizar el estudio, los investigadores reclutaron a 14 adultos que mostraron ansiedad a una serie de preguntas sobre matemáticas. Las preguntas evaluaron la propia ansiedad al recibir un libro de matemáticas, caminar hacia la clase de matemáticas o realizar los requisitos de matemáticas para la graduación. Pruebas adicionales mostraron que estos individuos no eran ansiosos en general, sino que tenían una respuesta ansiosa específica para las situaciones relacionadas con las matemáticas.
Se les preguntó la validez de la ecuación (12×4) – 19 = 29 y se les aplicó cortos rompecabezas de palabras mientras se les aplicaba el IRMf. En estos rompecabezas (por ejemplo: yrestym) los sujetos tenían que determinar si al revertir el orden de las palabras, producía una palabra correctamente escrita en inglés.
Las imágenes por IRMf mostraron que la anticipación de las matemáticas causaba una respuesta cerebral similar al dolor físico. Mientras mayor era la ansiedad en la persona sobre las matemáticas, más se activa la ínsula posterior: un tejido que está ubicado por encima de la oreja y que está asociado con el registro de amenazas directas para el cuerpo, así como también la experiencia de dolor.
Curiosamente, los niveles de ansiedad de matemáticas cuando los sujetos estaban realizando las pruebas de matemáticas, no se relacionaron con la actividad cerebral en la ínsula o en cualquier otra región cerebral
¿Qué significan estos resultados?
Estos resultados sugieren que aquellos sujetos con ansiedad a las matemáticas, pueden experimentar una dolorosa sensación que puede comenzar mucho antes de que la persona se siente a realizar un exámen de matemáticas. Y demuestra que la ansiedad por las matemáticas no solo es un indicador de un mal desempeño sino que también es un indicador de una reacción psicológica negativa y debe ser tratado como cualquier otra fobia, así sostuvieron los investigadores.
Fuente: news.uchicago.edu
Imagen: ScienceDaily