El sabor del limón, la suavidad de un pétalo de rosa, los sonidos que componen una palabra, son algunas formas de percibir el mundo exterior a través de los sentidos. Y es que, como seres humanos, dependemos de los sentidos para percibir tanto el mundo exterior como a nosotros mismos y a los demás. Sin embargo, un proceso que sucede en nuestros cerebros casi sin darnos cuenta son las predicciones que genera la corteza cerebral sobre lo que sucederá a continuación y el hecho de que las neuronas a cargo del procesamiento sensorial solo codifican la diferencia entre nuestras predicciones y lo que sucede en realidad.
Nuestras creencias subjetivas sobre el mundo físico tienen un papel decisivo en cómo percibimos la realidad, explica el Dr. Alejandro Tabas, primer autor de un estudio reciente que mostró que no solo la corteza cerebral, sino toda la vía auditiva, representa sonidos de acuerdo con expectativas previas (Tabas et al., 2020).
¿Por qué es importante?
Estas predicciones son tan relevantes en nuestras vidas diarias, que las deficiencias en la transmisión de expectativas a la vía subcortical podrían tener una profunda repercusión en la cognición.
La dislexia del desarrollo, el trastorno del aprendizaje más extendido, ya se ha relacionado con respuestas alteradas en la vía auditiva subcortical y con dificultades para aprovechar las regularidades de los estímulos en la percepción auditiva. Los nuevos resultados podrían proporcionar una explicación unificada de por qué las personas con dislexia tienen dificultades en la percepción del habla y, también, proporcionar a los neurocientíficos clínicos un nuevo conjunto de hipótesis sobre el origen de otros trastornos neuronales relacionados con el procesamiento sensorial.
¿Qué metodología usaron?
A través de imágenes de resonancia magnética funcional (fMRI), los investigadores midieron las respuestas cerebrales de 19 participantes mientras escuchaban secuencias de sonidos. Se indicó a los participantes que encontraran cuál de los sonidos de la secuencia se desviaba de los demás. Luego, se manipularon las expectativas de los sujetos para que esperaran el sonido desviado en ciertas posiciones de las secuencias.
El equipo de investigación examinó las respuestas provocadas por los sonidos desviados en los dos núcleos principales de la vía subcortical responsable del procesamiento auditivo: el colículo inferior y el cuerpo geniculado medial. Aunque los participantes reconocieron al desviado más rápido cuando se colocó en las posiciones donde lo esperaban, los núcleos subcorticales codificaron los sonidos solo cuando fueron colocados en posiciones inesperadas.
La codificación predictiva
Esta teoría general del procesamiento sensorial describe la percepción como un proceso de prueba de hipótesis. Asume que el cerebro genera constantemente predicciones sobre cómo se verá, sonará, sentirá y olerá el mundo físico en el próximo instante, y que las neuronas a cargo de procesar nuestros sentidos ahorran recursos al representar solo las diferencias entre estas predicciones y el mundo físico real.
Los nuevos hallazgos demuestran que la corteza cerebral (la parte del cerebro que está más desarrollada en humanos y simios) no solo escanea el mundo sensorial probando estas creencias contra la información sensorial real, sino que este proceso también domina las partes más primitivas y conservadas evolutivamente del cerebro. Es decir que todo lo que percibimos podría ser profundamente contaminado por nuestras creencias subjetivas sobre el mundo físico.
Referencia bibliográfica: Tabas, A., Mihai, G., Kiebel, S., Trampel, R., & von Kriegstein, K. (2020). Abstract rules drive adaptation in the subcortical sensory pathway. eLife, 9. https://doi.org/10.7554/eLife.64501
Fuente: Science Daily