El artículo de hoy tiene como finalidad el daros algunas respuestas a preguntas que os surgen a los padres cuando vuestro hijo os habla por primera vez de ese amiguito tan especial que tiene y únicamente conocido por él, o bien, cuando empezáis a sospechar de su posible existencia al observar el comportamiento de vuestro hijo. En relación a esto último, señalaros que alrededor del 25% de los padres no os dais cuenta de que vuestro hijo tiene un amigo imaginario. (Carlson & Taylor, 2004)
Conociendo más acerca el amiguito especial de vuestro hijo
¿Qué es un amigo imaginario? Hay infinitas definiciones acerca de lo que se entiende por “amigo imaginario”, y yo personalmente, tras haber leído múltiples de ellas, destacaría la elaborada por la especialista estadounidense Margaret Svendsen que define al amigo imaginario como:
“un personaje invisible con quien el niño juega durante varios meses, que tiene un aire de realidad para el pequeño, pero ninguna base objetiva aparente”.
De acuerdo al investigado Dr. Evan Kidd de la Facultad de Ciencias Psicológicas de La Trobe en Australia y a su colaboradora Anna Roby, alrededor del 65% de los niños con edades comprendidas entre los tres años de edad y los siete años de edad tienen un amigo imaginario. Dicha relación de amistad, como revela investigaciones realizadas por Marjorie Taylor y su grupo de trabajo en Oregón, pueden prolongase hasta los siete años e incluso en el 30% de los niños, se mantiene más allá de los siete años.
alrededor del 65% de los niños con edades comprendidas entre los tres años de edad y los siete años de edad tienen un amigo imaginario
La aparición del amigo imaginario si bien se puede producir dentro de cualquier etapa evolutiva de vuestro hijo, la edad de más frecuente aparición es entre los dos y los tres años de edad, manteniéndose hasta los siete años de edad en el 70% de los niños y despareciendo por completo a los trece años de edad en el 30 % de los niños. Eso sí, hay un mínimo porcentaje de casos a los que su amigo imaginario lo acompañaban incluso en la edad adulta. (Carlson & Taylor, 2004)
Su amigo imaginario puede tener diferente naturaleza, así pueden ser seres completamente invisibles e idealizados como sus héroes preferidos, hadas o duendes que aparecen en sus cuentos de cabecera, o simplemente un amiguito invisible, o bien, pueden estar identificados con algún objeto, como sería un osito de peluche o una muñeca.
Independientemente de la naturaleza que adopte su amigo especial, éste tiene un nombre propio con rasgos físicos bien definidos e incluso una determinada personalidad con sus propias maneras de actuar que no tienen que ser las mismas que las de vuestro hijo. Toda esta riqueza de matices hace que vuestro hijo y su amigo especial no siempre tengan que estar de acuerdo, lo que favorecerá la interacción social al tener que darle explicaciones, negociar y evidentemente, hablarle. Con este amigo es con quién comparte su tiempo lúdico, sus juegos y sus juguetes.
¿Cree mi hijo realmente que es real?
Su hijo insistirá en su existencia real cada vez que le preguntéis, aunque a pesar de las vivencias compartidas con su amigo imaginario, en el fondo sabe que es un producto de su fantasía y entiende que no es real.
Este fenómeno especial tiene una mayor probabilidad de aparición en hijos únicos o en el primero de los hermanos, que al encontrarse rodeados por un mundo de adultos encuentra en su amigo imaginario una posible solución al vacío social que puede sentir a la hora de jugar.
La presencia del amigo imaginario se ha asociado a niños que tienen una mayor sensibilidad y que están más en contacto con la imaginación y la fantasía. Es más, hay diversos estudios, entre los que se encuentra el llevado a cabo por el Dr.Kidd y Anna Roby, que han puesto de manifiesto que estos niños son adultos más creativos y artísticos, acercándose más a expresiones de tipos artísticas como son el arte o la poesía. En relación a lo comentado, indicar que es raro que estos niños muestren conductas agresivas.
¿Cuál es la función del amigo imaginario? ¿Para qué le sirve a vuestro hijo?
Los amigos imaginarios son un recurso que utiliza vuestro hijo para satisfacer algunas de sus necesidades que no se le brinda en su medio.
La mayoría de autores, como el psicólogo educativo Dr. Karen Majors Chartered o el profesor titular de Psicología del Instituto de Educación de la Universidad de Londres, el Dr. Ed Baines, están de acuerdo en que el amigo imaginario tiene una función positiva para el niño al ser un vehículo de transmisión de sus sentimientos en un momento de su etapa evolutiva en que tiene dificultades en expresarlos. Es más, incluso los sentimientos negativos propios del niño también se lo atribuye a su amigo imaginario como sería en el caso de que tras un comportamiento inadecuado le culpara a su amigo especial con el fin de evitar el castigo.
Así mismo, estos amigos imaginarios responden a idealizaciones e ideas positivas. Con su amigo especial tiene oportunidad de satisfacer sus deseos y anhelos, que como ya he señalado, necesidades que no tiene en su entorno habitual.
La presencia del amigo imaginario se ha asociado a niños que tienen una mayor sensibilidad y que están más en contacto con la imaginación y la fantasía
Otra función primordial es la de protección para el niño, ya que además de proporcionarle compañía e interacción, también lo utiliza para liberarse de las tensiones y del estrés que el niño puede experimentar tanto en el colegio como en el hogar, convirtiéndose de esta manera su amigo imaginario en un refugio dónde encontrarse seguro del mundo adulto.
Por último, algunos autores entre los que se encuentra la psicóloga Jacqueline Benavides Delgado, también señalan como una función de estos amigos especiales la de suplir las carencias afectivas o sociales que el niño presenta, sin embargo esta función se daría en un porcentaje bajo de casos.
Entonces, ¿qué podéis o debéis hacer los padres cuando aparece un amigo imaginario en la vida de vuestro hijo? En primer lugar, y tras haber leído el artículo presente, no alarmaros y mantener la calma pues el tener un amigo imaginario es muy normal en ciertas etapas evolutivas del niño y como hemos ido desmenuzando, aporta múltiples beneficios. Por ello, debéis de comportaros con normalidad y abordar el tema con total naturalidad, conversando con vuestro hijo acerca de su amigo especial, preguntándole en qué le ayuda, qué actividades le gusta compartir con él, etc., pero teniendo especial cuidado en no ser partícipes ni estimular la existencia de su amigo imaginario. Así mismo, tampoco debéis de decirle a vuestro hijo que está mintiendo y negar la existencia de los amigos imaginarios.
Si bien es cierto que no debe ser motivo de preocupación el que un niño tenga un amigo imaginario, también es cierto que debéis de estar observando continuamente la interacción de vuestro hijo con su amigo especial. Conductas que pueden poner en alerta y ser indicativas de que el amigo imaginario se está convirtiendo en un problema es cuando la existencia de ese compañero especial dificulta que vuestro hijo establezca vínculos con otros niños al preferir jugar solo con su amigo especial, si lo emplea para evadir responsabilidades o si sospecháis de que vuestro hijo tiene dificultad en establecer el límite entre la fantasía y la realidad. Cuando se advierten este tipo de conductas, se recomienda el acudir a un profesional.
Artículo previamente publicado en el blog especializado de la psicóloga clínica Miriam Narvais y cedido a Psyciencia para su publicación.
Referencias:
Benavides Delgado, Jaqueline. (2007). La Creación de Amigos Imaginarios en los Niños: ¿Un Problema Clínico?. Tesis Psicológica, Noviembre-Sin mes, 59-64.
British Psychological Society (BPS). (2013, January 10). Advantages of imaginary friends. ScienceDaily.
Carlson S. and Taylor M. 2004 Pretend friends: real benefits. Summary published in USA Today (December 204) – Original article in Developmental Psychology (October 2004).
Dani Cooper. Make-believe leads to better communicators. ABC. News in Science (ABC Science). Tuesday, 2 June 2009.
Taylor, M. (1999). Imaginary companions and the children who create them. New York: Oxford University Press.
Underwood, Penny. Real benefits in imaginary friends. Bulletin News.Knowledge.Life. Ideas and society . 2 junio de 2009, nº 02. .