El colega Daniel Comin escribió en Autismo Diario, la web más leída sobre autismo en hispanoamérica y España, un artículo profundo y muy lúcido sobre una de las situaciones que más estrés genera a los padres de niños con autismo: Explicar o no que su hijo tiene autismo y, si así lo deciden, ¿cómo hacerlo?
En su artículo sostiene que, en determinadas situaciones, compartir la información del diagnóstico puede mejorar drásticamente la calidad de vida del niño con autismo, como por ejemplo en la escuela. Pero Comin es muy respetuoso de los padres y resalta que son ellos los que deben decidir con quién compartir o no esta información.
Así también, nos explica por qué es importante ser cuidadoso con las expresiones y propone utilizar la palabra desafío en vez de debilidad o déficit, porque estas palabras ponen énfasis en debilidades, en cambio la palabra «desafío» supone el interés de superación.
Comin también nos da recomendaciones para explicar concretamente sobre el autismo a los familiares y escuelas que no saben bien de qué se trata el trastorno.
Muchas veces los padres de los niños con autismo, abatidos por los sentimientos de impotencia a causa de una sociedad todavía muy ignorante sobre el autismo, toman una actitud de ellos contra el mundo sin importarles las palabras o la actitud confrontativa que pueden usar. Y esto es lo que más me gustó del artículo de Daniel Comin, insta a los padres a que sean más compasivos, que se mantengan calmos y que sean amables y afectuosos con las personas, porque esto fomentará que ellos también los escuchen y los ayuden.
Un fragmento del artículo:
Entiendan el autismo como algo que aunque complejo, les obligará a esforzarse mucho más, ustedes deberán enfrentar muchos problemas con los que jamás pensaron que se iban a enfrentar, llorarán, se deprimirán, tendrán momentos muy duros, pero, a cambio su visión del mundo cambiará radicalmente. Deberán estar preparados para ver el mundo de forma diferente, eliminarán de su mente muchas ideas preconcebidas, deberán aprender a ser más tolerantes, más pacientes, más tenaces, deberán estudiar y leer como si les fuera la vida, su visión social cambiará, entenderán cosas que antes ni siquiera podían plantearse, es muy probable que tener un hijo con autismo les convierta a ustedes en mejores personas.
Yo trabajo con niños con problemas de conducta, desarrollo y con TEA y se las dificultades que ellos y sus padres atraviesan cuando van a la escuela y asisten a diversas situaciones de interacción social. Por eso les insisto que lean el artículo y lo compartan.