¿Qué podés hacer por un amigo que sufre de depresión hace tiempo y has agotado tus reservas de empatía? Aunque se trata de un tema complejo, los expertos tienen algunas recomendaciones:
No subestimes el poder de las visitas
Según el Dr. Norman Rosenthal, profesor de psiquiatría en la Escuela de Medicina de la Universidad Georgetown, puede que sientas que no sos bienvenido, pero el solo hecho de estar allí con la persona y recordarle que te importa y es especial para vos, es importante para que no se sienta sola.
No trates de animarlo u ofrecerle consejos
De acuerdo con la psicoterapeuta Megan Devine, recordarle a la persona con depresión todas las cosas buenas que tiene no solo no ayudará a cambiar su estado de ánimo sino que además podría hacer que la persona sienta que no la comprendes.
Sugerirle formas de mejorar su vida tampoco sirve de nada. Lo mejor que podés hacer es escuchar y apoyarla validando su tristeza y sufrimiento.
Está bien preguntar si tiene pensamientos suicidas
Puede que te de miedo ofender a tu amigo, o peor, hacer que piense en el suicidio. Sin embargo, Allen Doederlein, vicepresidente ejecutiva del Depression and Bipolar Support Alliance, aclara que no es posible despertar pensamientos suicidas solo con preguntar sobre ellos.
Si la persona responde que sí los tiene, entonces debes preguntar con calma cuándo y cómo; es más fácil prevenir que se lastime si sabes estos detalles.
Toma con seriedad las menciones a la muerte
Incluso aunque la persona con depresión lo mencione de manera casual, es importante hacer preguntas. Si las respuestas no te dan sensación de confianza en relación a la seguridad de la persona, los expertos aconsejan involucrar a un profesional tan pronto como sea posible.
Comunicate con su psicólogo o psiquiatra. Si esto no es posible, algunos países tienen líneas telefónicas de prevención de suicidio; también podes llevarlo a la sala de emergencia del hospital. Decile que esto es lo que se debe hacer cuando la vida de un ser amado está en peligro.
Facilita tanto como sea posible esa primera cita con un profesional
Vos solo no podés con esta situación, no importa que tan paciente y amoroso seas. Una persona con depresión severa necesita asistencia profesional de un psicólogo o psiquiatra.
Aunque no puedas controlar su recuperación, lo que si podés hacer es asegurarte de que hacer la cita con un profesional sea lo más fácil posible.
Tal vez puedas sentarte con la persona mientras llama, ayudarla a encontrar un profesional acorde a sus posibilidades económicas o incluso acompañarlo la primera vez (si te sentís cómodo con ello).
Si no estás seguro de qué profesional debes buscar o no sabes si es bueno, siempre podés pedir recomendaciones o recordar que los profesionales te guiarán al especialista que necesitas.
Lo importante es no pensarlo mucho. Primero involucrá a un profesional para que no seas el único manejando la situación. Sin embargo, si en la primera cita el profesional no te parece de mucha ayuda, busca a alguien más.
Por último, y para ayudarte un poco en la búsqueda, podés revisar esta lista con las terapias con demostrada eficacia para el tratamiento de la depresión.
Cuídate y establece límites
Cuando una persona amable y considerada está deprimida, puede que haga cosas que no la caracterizan, como ser mala y egocéntrica. Es agotador, doloroso y duro buscar la forma correcta de reaccionar cuando pelean o mandan mensajes agresivos.
Primero debemos recordar que la depresión cambia completamente a una persona, desde sus hábitos hasta su forma de hablar y escribir.
En segundo lugar, Devine nos recuerda que no tenemos que discutir cada vez que nos buscan. El hecho de que una persona este deprimida no es justificación para ser abusivos con otros. Poné límites claros y directos: “Parece que estas sufriendo mucho ahora. Pero no por eso podés insultarme.”
Puede ser también que esta persona te demande tanto tiempo que afecte a otras relaciones interpersonales o incluso tu trabajo. Es importante que tengas en claro que si vos no estás bien, no podés ayudar a tu amigo.
Está bien no estar disponible las 24 horas del día, tratá de ser claro sobre cuándo podés y no podés ayudarlo. Tal vez podés decirle algo similar a: “Se que estás sufriendo, y quiero estar ahí contigo pero hay momentos en que no puedo estar físicamente.”
Luego armá un horario y animalo amablemente a seguirlo. Saber cuándo se verán puede ser de ayuda para ambos.
Recordá, las personas se recuperan de la depresión
Puede ser difícil cuando estás con una persona en medio de una depresión recordar cómo era antes. A veces tampoco podemos visualizar que habrá un después. Pero debemos recordar que es posible recuperarse de la depresión y siguiendo esta guía podes ayudar a tu ser querido a acercarse a esa recuperación.
Fuente: The New York Times
1 comentario
ES LO MÁS REAL Y concreto que he leído ultimamente sobre EL APOYO que necesitamos los que sufrimos de la maldita depresión! Nosotr@s no buscamos SOLUCIONES!! …sólo queremos CONTENCIÓN emocional y física (“TE ESTOY TRATANDO DE ENTENDERTE”..”ESTOY ACÁ!”.. “TE QUIERO PESE A TODO!”…”¿PUEDO DARTE UN ABRAZO DE OSO?”..)
A veces una llamada corta, UN CORREO donde te dicen “no me he olvidado de ti, NO ESTáS SOLA!” e incluso el silencio de un ABRAZO sentido y apretado, para poder soltar nuestras lágrimas NOS BASTA.. :'(
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