“There is as much living in a moment of pain as in a moment of joy.”
“Hay tanto vivir en un momento de dolor como en un momento de alegría.”
Kirk Strosahl
Estamos en cuarentena, distanciados de todos y de todo, debido a un virus que se esparce con mucha velocidad y puede ser letal para un grupo de personas. No sabemos exactamente qué va a resultar de todo esto, para la sociedad en general y para nosotros en particular. Todo eso da miedo. Y si nosotros tenemos miedo, ¿los chicos cómo estarán?
Primero que nada, quiero que sepas que si sentís miedo, eso está bien. De hecho, cualquier cosa que sientas está bien. No hay una forma correcta de sentirse en una cuarentena. También quiero que sepas que muchas de las cosas que te ayudan a vos, también son útiles para chicos, solo que explicadas en un lenguaje que puedan entender según su edad.
En esta situación de cambios rápidos y distanciamiento social estoy segura de que, como padre o madre, preferirías que tus hijos salgan fortalecidos, resilientes. Esperamos que los siguientes puntos te sirvan de guía para conseguirlo.
Honestidad, escucha y corrección de información
¿Qué hago? Se tan honesto como puedas, escucha lo que ellos saben y explora sus sentimientos. Esto sirve no solo para empezar la conversación sino también para corregir cualquier información errada que puedan tener.
¿Cómo? Hacé preguntas para asegurarte de que te entienden y mostrá disposición a hablar sobre el tema cuando la/el niña/o quiera.
¿Y si no sé la respuesta? Decile que vas a tratar de averiguar… y hacelo, claro.
Ejemplos de cosas que podrías decir:
- Estamos en esto juntos y mi prioridad es que estés segura/o.
- ¿Cómo te sentís sobre eso? (Escucha)
- ¿Cuál crees que sería una buena respuesta?
- Estas son las cosas que necesitamos hacer.
- No somos solo nosotros, muchas muchas personas están lidiando con esto.
¿Por qué es importante? Al sentirse incluidos, los niños y niñas podrán comunicar sus emociones y se sentirán reconfortados, sin importar el tema. El hecho de sentirse amados y cercanos a sus padres, les da la confianza necesaria para enfrentar la vida y también las situaciones estresantes. Los chicos más grandes pueden encontrar seguridad cuando te ayudan a buscar formas de lidiar con la ansiedad o pasos que puede tomar la familia para prepararse para la emergencia.
Rutinas
¿Qué hago? Establezca una rutina y manténgala en marcha tanto como pueda, pero muéstrele a su hijo cómo manejar los cambios repentinos e inevitables y los enojos.
¿Por qué es importante? Para crear una sensación de normalidad pero sentirse preparados en caso de que hayan cambios.
¡No estoy segura/o de cómo hacer esto! Es una situación nueva y todos estamos aprendiendo. Si necesitas orientación sobre estos temas, consulta libros o recursos en línea (por ejemplo este artículo que publicamos recientemente). Sumado a esto, muchos padres comparten lo que les funciona en grupos en línea o en los comentarios debajo de los artículos para padres.
Lectura
Hay muchas opciones para una lectura placentera para todas las edades. Buscá “libros digitales gratuitos” para la edad y categoría que desees.
Cuidado personal
Mantené las prácticas de cuidado personal para vos y tus hijos. Beber agua. Comer comida sana. Ejercicio. Dormir bien. Estas cosas ayudan enormemente con la salud, la ansiedad, la resistencia y la fuerza.
Tené confianza en tus habilidades parentales. Conoces mejor que nadie a tu hijo/a y cómo podría reaccionar. Ajusta y adapta cualquier sugerencia que encuentres a tu situación particular.
Ideas simples para pasar tiempos difíciles
- Arte: funciona para todas las edad. Dibujar, colorear o pintar la casa con tu niño de 3 años, un pincel grande y un balde de agua.
- Un diario: escribir y dibujar son formas muy buenas de pasar tiempos difíciles y procesar ideas y sentimientos.
- Mover ayuda: si tenés un patio, salí a caminar, hacer carreras o jugar afuera. Si no, busca un lugar en la casa donde puedan bailar o hacer ejercicios divertidos.
- Naturaleza: las plantas, piedras o caracoles dan paz en cualquier lugar que los veas. Deja que los chicos los exploren y los cambien de lugar si quieren.
- Las masas y plastilinas (o masillas) no son solo para los chiquitos. Busca recetas fáciles en internet.
- Cocinar es una habilidad básica, además de enseñar sobre nutrición y proveer alivio.
A veces, el tema de “jugar” o “tareas“ provoca conversaciones serias, pero también suelen ser una salida segura para expresar y liberar los sentimientos. Los niños lo necesitan tanto como los adultos, pero permita que ocurra naturalmente. Nunca obligue a un niño a hablar o completar estas actividades. Tampoco te olvides de los juegos de mesa, juguetes, cartas y manualidades. La risa y el humor apropiado también pueden aliviar la tensión.
Si hay algo que podemos aprender de los miembros más jóvenes de nuestras familias, es que la vida continúa de manera completa, rica y emocionante. Puede parecer que esto no es cierto a veces, pero solo tenemos que dar un paso, una respiración, un día a la vez.
Fuente: PsychCentral