Cochrane es una red internacional de investigadores independientes que reúne y analiza la mejor evidencia científica disponible para ayudar a las personas, instituciones y gobiernos a tomar decisiones informadas. Y en julio del año pasado publicaron una importante revisión de la terapia de activación conductual para la depresión de 53 estudios y 5495 participantes.
Sus conclusiones:
Esta revisión sistemática sugiere que la activación conductual puede ser más eficaz que la terapia humanista, la medicación y el tratamiento habitual, y que puede no ser menos eficaz que la TCC, la terapia psicodinámica o la lista de espera. Sin embargo, la confianza en estos hallazgos es limitada debido a la preocupación por la certeza de la evidencia.
No se encontró evidencia de una diferencia en la aceptabilidad del tratamiento a corto plazo (según el número de abandonos) entre la activación conductual y la mayoría de los grupos de comparación (TCC, terapia humanista, lista de espera, placebo, medicación, ningún tratamiento o tratamiento habitual). Una vez más, la confianza en todos estos hallazgos es limitada debido a la preocupación por la certeza de la evidencia.
No se disponía de datos sobre la eficacia de la activación conductual en comparación con el placebo, ni sobre la aceptabilidad de la activación conductual comparada con la terapia psicodinámica, interpersonal, analítica cognitiva y terapias integradoras.
La evidencia podría reforzarse con una mejor presentación de informes y ECA de mejor calidad sobre la activación conductual, y mediante la evaluación de los mecanismos de funcionamiento de la misma.
¿Qué significa esto?
- La popularización de las explicaciones biomédicas de la depresión han hecho creer a las personas y personal sanitario que los antidepresivos son más efectivos que las psicoterapias o a lo sumo que son “complementos”. Sin embargo, nuevamente se demuestra que existen tratamientos psicológicos con mayor efectividad y con menos efectos secundarios.
- Pareciera ser que los resultados no son muy sobresalientes cuando se compara con otros tratamientos psicológicos como la TCC o la terapia psicodinámica. Pero en realidad es todo lo contrario. La activación conductual para depresión es un tratamiento muy sencillo (no confundir con simple) y breve que logra los mismos resultados con menor inversión de recursos que los tratamientos más complicados.
- Todavía falta mucho por aprender. Son necesarios más ensayos controlados y de mejor calidad que permitan evaluar la aceptabilidad y los efectos de la activación conductual a largo plazo.
- Estos hallazgos no son los únicos. Otras instituciones como la Asociación Americana de Psicología (APA) y la propia Organización Mundial de la Salud (OMS) la incluyen también como un tratamiento de primera linea para la depresión.
Fuente: Cochrane