El pasado 21 de Septiembre se recordó el día Internacional del Alzheimer. En Psyciencia aprovechamos la ocasión para publicar varios artículos (1, 2, 3) con el objetivo de ofrecer más información sobre las características de esta enfermedad y la necesidad de seguir apoyando la investigación del tema. Recientemente, nos encontramos con un estudio, publicado en el Journal of Neuropsychiatry and Clinical Neuroscience (JNCN), que, para nuestra sorpresa, se enfocó en la población hispana.
En el paper se encontró que ciertos síntomas asociados con el desarrollo de la enfermedad de Alzheimer (como la depresión) afectan a la población hispana de manera más frecuente y severa. Los descubrimientos sugieren que la enfermedad se manifiesta de manera diferente en la población hispana.
“Nuestro estudio muestra que la severidad y proporción de síntomas neuropsiquiátricos es significativamente mayor en un grupo hispano comparado con blancos no-hispanos. Esto podría tener un impacto significativo en el tratamiento y comprensión sobre cómo la enfermedad de Alzheimer progresa en hispanos”, comenta el autor principal, Dr. Ricardo Salazar.
En el Alzheimer puede haber tanto deterioro cognitivo como conductual. Las señales de deterioro cognitivo incluyen pérdida de memoria y problemas de orientación y funcionamiento físico. Por otro lado, los signos comportamentales o neuropsiquiátricos incluyen: depresión, ansiedad, delirios, apatía, alucinaciones y elación. Estos últimos han sido relacionados con mayores tasas de institucionalización y un progreso más veloz de la enfermedad.
Para conocer cómo se manifiestan los síntomas en la población hispana, el Dr. Salazar y su equipo reclutaron a 2189 individuos de la base de datos Texas Alzheimer’s Research and Care Consortium (TARCC). Los pacientes de dicha base de datos son mayormente personas blancas no-hispanas y méxico-americanos que han sido diagnosticados con Alzheimer, con discapacidades cognitivas moderadas (MCI) o que están saludables (grupo control). El equipo de investigadores se centró en el análisis del Neuropsychiatric Inventory Questionnaire (NPI-Q), un examen utilizado para evaluar la extensión de 12 síntomas neuropsiquiátricos.
La revisión de datos mostró que, durante la etapa de MCI, todas las etnias se veían afectadas de manera similar con respecto a los síntomas neuropsiquiátricos. Sin embargo, al desarrollarse la enfermedad de Alzheimer, la severidad de los síntomas antes mencionados en la población hispana aumentó significativamente.
Es esto lo que hace creer al Dr. Salazar que hay un proceso de enfermedad diferente en los hispanos:
“Cuando los pacientes tienen síntomas neuropsiquiátricos, eso significa un deterioro en diferentes áreas del cerebro. Yo creo que estudios con imágenes funcionales podrían mostrar diferencias en la ubicación del amiloide o la acumulación de placas en los cerebros de hispanos con la enfermedad de Alzheimer.”
El estudio también mostró que la depresión y la ansiedad eran más frecuentes en hispanos de 50 años o más. Lo que corroboraría hallazgos de estudios pasados que sugieren que la depresión podría ser uno de los primeros signos de Alzheimer y que además serían un signo temprano de la enfermedad en esta población. Los autores creen que el tratamiento de estos primeros síntomas podría retrasar la enfermedad.
El Dr. Salazar aclara también que el estudio tuvo limitaciones: la etnia fue autoreportada y hubo una menor cantidad de participantes hispanos con Alzheimer.
Claramente esto nos indica una necesidad de profundizar la investigación del tema, especialmente para nosotros los hispanos, ya que ayudaría a mejorar no solo el tratamiento si no también la prevención de esta agotadora enfermedad en nuestra población.
Fuente: Psypost