Estupendo artículo de Karelia Vasquez para El País:
Otros expertos opinan que la soltura con que se manejan palabras y conceptos de la psicología y la psiquiatría genera un sobreanálisis de cada interacción que puede dinamitar las relaciones personales. Si una amiga se distancia y cuando preguntas los motivos te suelta del tirón: “Hasta hoy he cuidado nuestra amistad como un tesoro, pero estamos evolucionando en direcciones opuestas y ya no estoy en condiciones de seguir invirtiendo en esta relación”, debes saber que semejante discurso no es de su autoría, solo está siguiendo las pautas de una de las tantas plantillas virales de TikTok para romper un vínculo. Tienen en común la jerga terapéutica, el tono displicente y profesional, la condescendencia y un mínimo de empatía. Otra posibilidad es que haya encontrado el manual de instrucciones en Twitter, donde también se comparten estas plantillas para despachar conversaciones desagradables en la mínima unidad de tiempo posible, con frialdad y una abundante terminología psicológica que deja a la otra parte desarmada.
Hablar con términos psicológicos y decir que van al psicólogo es la nueva estrategia de seducción. Muy bueno el análisis que presenta el artículo.
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