“Estás en una batalla contra el cáncer y debes esforzarte para ganarla”. Normalmente decimos o escuchamos metáforas como ésta cuando intentamos mantener motivada y activa a las personas que sufren de cáncer. Sin embargo, nuevas investigaciones nos alarman sobre los peligros de utilizar metáforas que se refieren al cáncer como un enemigo.
A principios de este año, Elena Semino y su equipo publicaron en la revista SAGE (Descarga el PDF completo), una investigación que analizó 1.5 millones de palabras durante entrevistas y discusiones online sobre el cáncer, y encontraron que las metáforas de guerra pueden producir sentimientos de culpa y fracaso en los pacientes de cáncer. Ellos pueden sentir que sí se están muriendo es porque no han luchado lo suficiente o se dieron por vencidos, cuando en realidad a esas alturas de la enfermedad los pacientes tienen poco o ningún control sobre el desarrollo del cáncer.
Las metáforas de guerra pueden producir sentimientos de culpa y fracaso en los pacientes de cáncer
A estos hallazgos se le suma una nueva revisión realizada por David Hauser y Norbert Schwarz que será publicada próximamente en la revista Personality and Social Psychology Bulletin que encontró que las metáforas de guerra podrían provocar que las personas sin cáncer tomen una actitud agresiva contra el cáncer que no concuerda con las conductas de prevención y tratamiento recomendadas y que son caracterizadas por la limitación y restricción. Como por ejemplo: reducir el consumo de carnes rojas, el consumo de alcohol, la prohibición del cigarrillo, etc.
En uno de los estudios revisados, se le pidió a los participantes que enumeraran una lista de conductas preventivas del cáncer que estuvieran dispuestos a realizar. Uno de los grupos recibió una metáfora relacionada con la guerra del cáncer (“Qué estarías dispuesto hacer para pelear contra el desarrollo del cáncer?”). El segundo grupo no recibió la metáfora de guerra. Se halló que el grupo de la metáfora enumeró significativamente menos conductas de prevención del cáncer. Para los autores, esto sugiere que el simple hecho de escuchar una metáfora sobre el cáncer puede disminuir la extensión de conductas que se nos vienen a la mente.
Otra de las revisiones incluyó a 313 participantes que leyeron pasajes de salud sobre el cáncer de colon. Una de ellas contenía metáforas que se refería al cáncer como un enemigo: “Esta enfermedad implica el levantamiento enemigo del crecimiento anormal en el intestino grueso”. La segunda frase no contenía una metáfora hostil sobre el cáncer. Hecho esto, los participantes evaluaron cuán dispuestos están de realizar conductas de prevención, detección y tratamiento. Aquellos que leyeron la metáfora del enemigo tenían menos intención de realizar conductas de prevención relacionadas con limitaciones de consumo de carnes rojas o el consumo excesivo de alcohol en comparación con los participantes que leyeron el segundo pasaje, libre de la metáfora del enemigo. Lo que sugiere que el lenguaje metafórico del cáncer como enemigo disminuye las intenciones de las personas de realizar conductas preventivas y de tratamiento del cáncer.
El lenguaje metafórico del cáncer como enemigo disminuye las intenciones de las personas de realizar conductas preventivas y de tratamiento del cáncer
Sólo basta con hacer una rápida búsqueda en google para encontrar que “batalla”, “pelea” “enemigo”y “ganar” son las palabras más asociadas al cáncer. Esto demuestra que será sumamente difícil cambiar la manera en que nos expresamos cuando intentamos ayudar a una persona que sufre de esta enfermedad. Según Semino las palabras como “viaje” serían un mejor sustituto de “guerra” en las metáforas ya que representa de una manera más humana y real la experiencia y lo que deben hacer las personas que sufren de cáncer.
Hauser, concluye su estudio diciendo que los profesionales médicos y medios de comunicación deberían tratar de ayudar a expandir la manera en que pensamos sobre la enfermedad. Él cree que sería beneficioso si exponemos las historias sobre el cáncer para que se expongan los aspectos de la enfermedad que no encajan con la conceptualización del cáncer como enemigo. Tal vez tu puedas iniciar el cambio cuando tengas que ofrecer tu ayuda y contención a una persona con cáncer.
Fuente: Michigan New, Time
Imagen: Fitness-Perth