La meditación basada en la atención plena (mindfulness) se perfila como una opción prometedora para el tratamiento del insomnio crónico, según un estudio reciente publicado en la revista Mindfulness.
El documento describe los resultados de un ensayo controlado aleatorio donde se estudiaron los efectos de la meditación mindfulness sobre los síntomas diurnos del insomnio y la excitación cognitiva-emocional en un grupo de 54 adultos.
Recordemos que el mindfulness, según lo define Jon Kabat, es la capacidad de prestar atención de manera consciente a la experiencia del momento presente con interés, curiosidad y aceptación. Además, no es la primera vez que se habla de la atención plena para el tratamiento de afectaciones físicas y psicológicas.
Según el investigador Jason Ong, de la Universidad Northwestern, su equipo ha “presentado avances (sobre los) efectos de la meditación mindfulness en el sueño y evidencia sobre la reducción efectiva de los trastornos del sueño. No obstante, ha habido poca investigación que estudie los efectos de la atención plena en otros aspectos del insomnio, como los factores cognitivos y emocionales, que desempeñan un papel clave en la perpetuación de los trastornos del sueño en el insomnio crónico. Por lo tanto, en este estudio se examinan los cambios de estas variables como parte de un ensayo controlado aleatorio sobre la meditación mindfulness (como tratamiento) para el insomnio”.
En el estudio, los participantes con insomnio crónico recibieron una terapia para reducción del estrés basada en atención plena, o completaron un diario de sueño antes de recibir una terapia conductual. Ambos tratamientos, basados en mindfulness, incluyeron la práctica de la meditación.
En el programa de reducción del estrés se incluyó educación general sobre el estrés, mientras que el diario de sueño para el insomnio proporcionó estrategias de comportamiento específicas para tratar el insomnio. El diario de sueño sirvió como condición de control, mientras que el programa de terapia conductual incluyó tratamientos conductuales estándar para el insomnio sin ningún entrenamiento de meditación.
Los resultados evidencian un logro significativo, como señala Json Ong. “Encontramos que la terapia basada en Mindfulness para el insomnio (MBTI), con una intervención basada en una meditación de 8 semanas, logró los mayores efectos en la reducción de pensamientos negativos y emociones relacionadas con el sueño. Por ejemplo, puede reducir el esfuerzo para forzar el sueño o la ansiedad que se produce cuando el sueño ha sido difícil durante muchas noches seguidas”.
En cuanto a las limitaciones del estudio, Ong reconoce que la muestra estudiada es relativamente pequeña, y que solo se analizaron personas que habían suministrado información completa para el estudio, lo que podría sobrestimar los efectos reales de la intervención. Adicionalmente, aunque los resultados sugieren que el mindfulness puede ser un tratamiento prometedor para el insomnio, aún queda por definir cómo la intervención puede ayudar a mejorar la calidad de sueño de las personas y reducir los pensamientos incómodos que afectan el descanso.
Referencia del estudio original: Ong, J.C., Xia, Y., Smith-Mason, C.E. et al. Mindfulness (2018) 9: 1702. doi: 10.1007/s12671-018-0911-6
Fuente: Psypost