Los médicos gozan de un privilegiado reconocido y prestigio social.Pero para obtenerlo tendrán que pasar los siete años más difíciles de su vida, tendrán que dedicar largas horas de estudio, muchas horas sin dormir, reducir sus actividades sociales, enfrentarse a la competitividad de sus compañeros y de las exigentes pruebas que les aplica sus facultades.
Y es tan estresante la carrera de medicina, que el 15% de los estudiantes de medicina dijo haber pensado en el suicidio, según una encuesta realizada en el Reino Unido, por la ya conocida revista académica BMJ.
intentan ocultar sus condiciones por miedo a que se manche su futuro como médicos
Fueron 1,122 los estudiantes de medicina que participaron en el estudio y en el mismo se encontró también que: el 30% de ellos tuvo una condición mental o recibió tratamiento durante sus años de estudio. Y el 80% de aquellos estudiantes con trastornos mentales, dijo que sintió falta de apoyo por parte de la administración de su universidad.
Otro hallazgo alarmante fue que cerca del 8% de los estudiantes dijo que consumían fármacos para ¨mejorar su capacidad mental¨ durante los exámenes.
Los estudiantes de medicina también luchan con el estigma de la salud mental aún reinante en las instituciones médicas e intentan ocultar sus condiciones por miedo a que se manche su futuro como médicos. Según ellos, los médicos pueden caer bajo el escrutinio excesivo de las juntas médicas y ser apartados de sus pacientes, porque las juntas administrativas temen que el trastorno mental afecte su habilidad como médicos.
La muestra del estudio fue pequeña, sólo 2%, y no representa a la población de estudiantes del Reino Unido, pero sin duda nos da una mirada al alto nivel de estrés que son sometidos, sus luchas con los trastornos mentales y el estigma de la salud mental.
Ahora la pregunta es: ¿Estos datos difieren de los estudiantes en latinoamérica?
Fuente: Time